Día Internacional de la Paz 2016: objetivos y relevancia

La Asamblea General de las Naciones Unidas declaró el 21 de setiembre el Día Internacional de la Paz, fecha consagrada al fortalecimiento de los ideales de paz entre todos los pueblos del mundo.

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El tema del 2016: "Los objetivos de desarrollo sostenible: elementos constitutivos de la paz".

En setiembre de 2015 se llevó a cabo, en Nueva York, una cumbre entre líderes mundiales, cuyo objetivo fue delinear 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible que deberán cumplirse en los próximos 15 años. El corazón de estos objetivos se centra en la eliminación de la pobreza, la protección del planeta y la garantía de prosperidad para todos los individuos. De esta manera, la sostenibilidad es el concepto que articula todas estas problemáticas.

La sostenibilidad es un concepto simple pero difícil de aplicar, que se refiere al hecho de satisfacer nuestras necesidades sin poner en peligro la supervivencia de generaciones futuras. La idea detrás de esta iniciativa es que el desarrollo sostenible permite eliminar las causas de conflictos políticos y bélicos, lo cual podría contribuir a la construcción de una paz duradera.

El video musical que verás a continuación, titulado "Los Objetivos de Desarrollo Sostenible mejoran la vida de todos alrededor del planeta", tiene como fin resumir la significación de la jornada así como profundizar sobre su importancia.

¿Acaso este tipo de iniciativas llevadas a cabo por la ONU siguen siendo relevantes?

Imagen Shutterstock

Las personas más escépticas podrían preguntarse: ¿qué va a cambiar con que designemos un día como el Día Internacional de la Paz? Y también: si la ONU en verdad tuviera algún tipo de poder para garantizar la paz mundial, ¿no deberíamos ya vivir en paz desde hace años? Después de todo, la ONU fue creada al final de la Segunda Guerra Mundial, en 1945, con el fin de evitar que sucesos de esa índole se repitieran.

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La Organización de las Naciones Unidas fue heredera de otra institución menos conocida pero igualmente importante: La Liga de las Naciones, fundada en 1920 con el fin de evitar que las atrocidades de la Primera Guerra Mundial volvieran a ocurrir. La historia no ha sido gentil con la Liga de las Naciones, juzgada como inútil e inservible, y es justo pensar que esas palabras son suaves si consideramos que la Segunda Guerra Mundial provocó la muerte de millones de personas.

Pero, ¿acaso la ONU es mucho mejor que su ancestro? Tiene sentido preguntarse: ¿cuál es la pertinencia de iniciativas como esta? Considerar al Día Internacional de la Paz como una propuesta válida implica adherir a la narrativa según la cual la ONU tiene un poder real sobre los sucesos que le dan forma a nuestro mundo. ¿Es así?

En el año 2003 el mundo asistió atónito mientras el gobierno de los Estados Unidos ignoraba por completo al Consejo de las Naciones Unidas y procedía a invadir (léase: colonizar y saquear) Iraq en toda impunidad y tranquilidad. Desde ese momento clave en la historia del siglo XXI, el valor de las Naciones Unidas se ha desprestigiado enormemente ante los ojos del mundo.

La pregunta es: ¿es posible que la ONU recupere su autoridad proponiendo jornadas para celebrar una paz que no parece ser capaz de asegurar?