Científicos recomiendan que los hombres que quieran ser padres congelen su esperma al cumplir 18 años

La nueva edad para ser padres primerizos está superando los 30 años, y si bien las mujeres son las que se preocupan de los riesgos de ser madre ya más cerca de los 40, los hombres no deberían quedarse atrás. Diversos estudios han demostrado que la edad del padre también incide en el desarrollo de posibles trastornos que afecten a los hijos. Por eso, un científico británico propone un inusual método para prevenir problemas: congelar esperma antes de culminar la adolescencia. El Doctor británico Kevin Smith, señaló que los hombres deberían congelar su esperma a los 18 años y que el costoso proceso y conservación de tal debería estar cubierto por el Estado, ya que es una forma de prevenir enfermedades.

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Congelar esperma antes que sea tarde

Cumplir 18 años supone una instancia fuertemente cargada de simbolismos. En muchos países se puede sacar la licencia de conducir, comprar alcohol y si lo que propone el Doctor Kevin Smith se hace realidad, también ir a un banco de esperma y entregar una muestra para congelar. En los últimos años, varios estudios indican que la edad del padre tiene una correlación directa con trastornos que pueden desarrollar los bebés, especialmente desde el punto de vista mental, aumentando las posibilidades de padecer autismo y otros desordenes.

Los riesgos no son tremendos, pero antes solo se creía que la edad de la mujer podía afectar al futuro bebé. Para asegurar la calidad del esperma en el momento que el hombre decida tener un hijo, sea a los 30 o a los 80 años, lo ideal sería congelarlo antes de que la producción sea de menor calidad. Un estudio realizado por la Universidad de Indiana en 2014, reveló que los hijos nacidos cuando su padre tenía 45 años o más, estaban en mayor riesgo de padecer ciertas condiciones que cuando su padre tenía 24 años.

Entre las conclusiones del estudio se menciona que los niños nacidos de padres mayores de 45 años tenían 3,5 veces más posibilidades de padecer autismo, 13 en el caso del trastorno por déficit de atención con hiperactividad y 20 veces más propensos a la bipolaridad.

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Salvar al mundo, espermatozoide por espermatozoide

Este científico, cuya área de especialidad es la bioética, está siendo fuertemente cuestionado por su idea, ya que quitaría naturalidad a las relaciones humanas y la procreación, piensa no solo en la generación siguiente, sino que también en las que seguirán poblando el planeta de ahora en adelante. Smith declaró que no solo se busca reducir las posibilidades de que los hijos de quienes no congelan su esperma padezcan enfermedades, sino que también de las futuras generaciones, ya que las mutaciones, por más que no produzcan efectos inmediatos, podrían quedar en los genes y se traspasarían de generación en generación.

Lo que este científico propone es que se utilice esperma en las mejores condiciones a la hora de procrear, por eso la importancia de congelarlo a los 18 años, según él la edad ideal. Además, el procedimiento y posterior conservación de las muestras deben ser a costo del gobierno. Para el Doctor Smith, el utilizar espermatozoides en condiciones ópticas ahorraría mucho dinero a futuro, por lo que se trataría de una inversión y no un gasto.

No todos están de acuerdo con los planteamientos de Kevin Smith. El director de la Sociedad Británica de Fertilidad, Adam Balen, indica que no solo lleva la intimidad al laboratorio, sino que también crea un sentido falso de seguridad, ya que el congelar el esperma no significa que este vaya a estar en buenas condiciones o libre de defectos genéticos.

¿Congelarías tu esperma para evitar problemas más adelante?

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