En el mundo hay muchísimas especies de animales interesantes que tienen datos curiosos o que sobresalen entre los demás por algún motivo; en este caso el avestruz es el ave más grande del mundo, y recorren la sabana africana y tierras desérticas y obtienen la mayoría del agua que consumen de las plantas que comen.
Avestruces: las aves más grandes del mundo

Aunque no pueden volar, las avestruces son corredoras fuertes y veloces. Pueden correr a una velocidad de hasta 70 kilómetros por hora y recorrar 50 kilómetros de distancia en una hora. Pueden utilizar sus alas como si fueran timones para ayudarles a cambiar la dirección cuando corren. Las patas largas y poderosas de las avestruces pueden cubrir de 3 a 5 metros en un solo paso. Estas patas también pueden ser armas muy poderosas; una patada de avestruz puede matar a un humano o un potencial predador como un león. Cada pata tiene una larga garra.
Estos animales viven en pequeñas manadas que, típicamente, son de alrededor de una docena de aves. Los machos alfa mantienen estas manadas, y se aparean con la hembra dominante del grupo. A veces también se da que el macho se aparee con otro ejemplar del grupo, y algunos machos secundarios de la manada pueden también aparearse con hembras no dominantes. Todas las hembras de la manada ponen sus huevos en el nido de la hembra dominante (aunque los suyos propios tienen el lugar dominante, al centro del nido). La hembra dominante y el macho alfa se toman turnos para incubar sus hevos gigantes, cada uno de los cuales pesa como dos docenas de huevos de gallina.
Al contrario de la creencia popular, las avestruces no entierran sus cabezas en la arena. El antiguo dicho probablemente se haya originado con uno de los comportamientos defensivos de estas aves. Cuando sienten que van a tener problemas, las avestruces se agacharán y presionarán sus largos cuellos contra el piso, en un intento de ser menos visibles. Su plumaje se mezcla bien con el suelo arenoso, y desde la distancia da la apariencia de que tienen sus cabezas enterradas en la arena.
Las avestruces comúnmente se alimentan de plantas, raíces y semillas, pero también pueden comer insectos, lagartijas u otras criaturas disponibles en su hábitat.









