La gastronomía se encuentra de luto tras la triste e inesperada noticia de que Anthony Bourdain, chef, autor, crítico y presentador de televisión estadounidense, falleció a sus 61 años. Fue encontrado sin vida en su habitación de un hotel francés, donde se hospedaba para la filmación de nuevos episodios de su programa sobre viajes y comida Parts Unknown.
Anthony Bourdain: todo lo que no sabías sobre el chef más famoso del mundo

«Es con extraordinaria tristeza que podemos confirmar la muerte de nuestro amigo y colega Anthony Bourdain. Su amor por la gran aventura, los nuevos amigos, la buena comida y bebida y las notables historias del mundo lo convirtieron en un narrador único. Sus talentos nunca dejaron de sorprendernos y lo extrañaremos mucho. Nuestros pensamientos y oraciones están con su hija y familia en este momento increíblemente difícil», expresó la CNN en un comunicado.
Mundialmente conocido por comer alimentos exóticos en programas de los canales Travel Channel y CNN, lo cierto es que Bourdain fue mucho más que solo un chef. Ciertos aspectos de su vida no son tan conocidos por la audiencia y te harán entender y querer todavía más a este distinto personaje.

Sus comienzos en la cocina
Bourdain nació en Nueva York y creció en el seno de una familia que lo volvió amante de la música, el cine y los libros. Su vocación culinaria surgió durante unas vacaciones familiares en Francia, a los 10 años cuando probó su primera ostra en un barco pesquero. Estudió en el Culinary Institute of America y comenzó trabajando como lavador de platos hasta convertirse en chef ejecutivo en diversas cocinas de Manhattan. Pero mientras desempeñaba su labor en la cocina, se volvió adicto a la cocaína, heroína y crack:
«Estábamos drogados todo el tiempo y no perdíamos oportunidad para meternos al cuarto frío a ‘conceptualizar’. No se tomaba prácticamente ninguna decisión si no había drogas de por medio», admite Bourdain en uno de sus libros.
Libro, televisión y salto a la fama
En 1999, Bourdain escribió un artículo llamado No comas antes de leer esto. Allí contó de una manera sumamente brutal, pero honesta, lo que pasaba a puerta cerradas en las cocinas de los restaurantes y logró ser publicado en la revista The New Yorker. Fue tal el éxito del texto que una editorial le propuso convertir el escrito en un libro. El resultado, Kitchen Confidential, pasó 44 semanas en la lista de las obras más vendidas y se tradujo a 22 idiomas.
A partir de ese momento, la vida del chef cambió totalmente: grabó su primer show televisivo, pero el salto a la fama vino definitivamente en 2005, con el programa Sin Reservas, que contó con 8 temporadas. En los episodios, el presentador probaba comidas exóticas y mostraba los aspectos más positivos de los lugares más remotos.

Viajero del mundo
Bourdain conoció una incontable cantidad de países por todos los continentes, pero sus viajes comenzaron mucho antes de sus programas de televisión. En una entrevista con Men's Journal, recordó su primer viaje a Japón que cambió su vida antes de publicar su libro:
«Fue como mi primer viaje de ácido. Fue esa expansión mental y climática porque pude ver el mundo de una manera completamente nueva. Fui allí pensando que había una cierta cantidad de colores primarios. Volví sabiendo que, de hecho, había 10 o 12 más. Me hizo querer hacer cosas. Me mostró que había mucho más en el mundo de lo que tenía alguna idea, había mucho que aprender y había tantas cosas por ahí.»
A favor de la igualdad
La actriz italiana Asia Argento era su pareja y fue una de las primeras en denunciar públicamente por acoso al productor de cine Harvey Weinstein, por lo que Bourdain se comprometió con el movimiento #MeToo y se mostró orgulloso de lo que su pareja y todo el movimiento lograron para combatir los abusos.
Estaba obsesionado con la película Road House
Además de la comida y la bebida, Bourdain era un fanático de la película de acción Road House:
«Puedes analizarla para siempre. Simplemente está pelando las capas de una cebolla, ya sabes. El subtexto es genial. Cuando intentas golpear al mismo tipo tres veces, ¿no consigues un arma, sabes lo que estoy diciendo? ¿Qué diablos, amigo? ¿Y qué empresa criminal es Jackie Treehorn de todos modos? Quiero decir, todo se trata de una maldita Road House, ¿en serio? ¿Y un concesionario de autos usados? Él ni siquiera está vendiendo metanfetaminas» declaró a Thrillist.
Amante de las artes marciales
Anthony tenía un muy buen estado físico (sí, a pesar de vivir comiendo y bebiendo) gracias a que practicaba el arte marcial brasileño jiu-jitsu todos los días sin que importara si estaba en su casa en Nueva York o de viaje grabando un programa (de hecho en Parts Unknown lo hemos visto entrenando).
Le daba igual cualquier cerveza
Su programa recibía críticas por parte de los televidentes amantes de la cerveza artesanal. Se argumentaba que el presentador no se detenía a probar la mejor cerveza del lugar, sino que simplemente bebía cualquiera.
«No he hecho el esfuerzo de caminar por la calle 10 cuadras hasta la cervecería donde están haciendo una puta IPA de Mumford and Sons. La gente se empeña en eso. Pero mira, me gusta la cerveza fría. Y me gusta pasar un buen rato. No me gusta hablar de cerveza, sinceramente. No me gusta hablar de vino. Me gusta beber cerveza. Si me traes una muy buena, una buena cerveza artesanal, la disfrutaré, y lo digo. Pero no voy a analizarlo» expresó en una entrevista.
Mucho más que solo comida
Bourdain dejó su huella en los miles y miles de seguidores que tenía en todo el mundo para que piensen y sientan la comida de otra manera. Pero además, en cada programa, especialmente en los que visitaba los lugares más remotos o con poblaciones marginadas, el chef promovió campañas por mejores condiciones de trabajo para el personal de aquellos restaurantes. Con razón era muy querido a todas partes.
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