La colectividad china se vistió de fiesta para darle la bienvenida al año nuevo chino. Los festejos dan comienzo al año 4712, que de acuerdo al milenario horóscopo chino corresponde al año de la Cabra, que deja atrás al Caballo de Madera.
Año Nuevo Chino en Buenos Aires


Esta nueva edición fue presentada por la Embajada de China, con el apoyo del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y del equipo del Barrio Chino, con el principal objetivo de fomentar el intercambio cultural entre la comunidad china y la argentina. Como ya es tradición, la celebración se llevó a cabo desde el mediodía hasta casi la medianoche, en la plaza de Barrancas de Belgrano, a pocos metros del popular Barrio Chino porteño. El lugar se llenó de visitantes orientales y locales, que recorrieron y disfrutaron de las distintas atracciones.

La gran oferta gastronómica fue el punto fuerte del acontecimiento: cientos de puestos ofrecieron platos típicos chinos a precios accesibles. Desde brochetes de langostinos rebozados, pinchos de cerdo agridulce y arrolladitos primavera, hasta sushi, woks de verduras y salteados orientales, fueron solo algunas de las cosas que se podían degustar a lo largo del paseo.
Como si esto fuera poco, también se sumaron puestos temáticos de diversos países, para que la gente pruebe platos típicos de las distintas comunidades, como deliciosas arepas venezolanas, o suculentos sándwiches austríacos de cerdo.
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Además, se llevaron a cabo distintas actividades propias de la cultura oriental: clases abiertas de artes marciales, percusión, pintura, canto, una exhibición de caligrafía china y hasta la ceremonia de cómo servir el té chino correctamente.
El evento contó con un gran escenario con dos inmensas pantallas en sus laterales, en donde se presentaron distintos shows de danza y música china. La cereza de la torta fue la popular Danza del Dragón y Baile del León, que estuvieron dando vueltas por todo el Barrio Chino y que se llevaron todos los aplausos.

Por supuesto que el festejo no se centró únicamente en la plaza de Barrancas, también se extendió hacia el Barrio Chino, en las intersecciones de Juramento y Arribeños, en donde todos los locales y restaurantes de la zona se adhirieron a la celebración.
Como todos los años, el festival fue totalmente gratuito y resultó un éxito total. Si justo estabas de vacaciones y no pudiste ir, no te preocupes. Por suerte se repite anualmente y parece ser que año tras año la celebración se hace cada vez más grande. Así que el año que viene, ¡es cita obligada!
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