A 80 años de la muerte de Federico García Lorca, se siguen investigando las circunstancias de su ejecución

En 1936, las tensiones sociales y políticas crecían en España y el país estaba a punto de sumergirse en una brutal guerra civil, la que eventualmente conduciría a la extensa  dictadura de Franco.

En la madrugada del 19 de agosto de 1936, hace exactamente 80 años, el gran poeta Federico García Lorca fue asesinado. Las circunstancias en torno a su muerte, ocurrida en medio de estas turbulencias, nunca fueron del todo aclaradas.

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Se sabe que fue ejecutado por un comando fascista y nacionalista, tal vez por ser homosexual, comunista, socialista o poeta, o por todas ellas juntas, pero hay un elemento crucial que no permite dar cierre a la trágica historia del célebre poeta granadino, y es que sus restos nunca fueron hallados.

A pesar de que esto parece tan lejano, hay heridas que todavía permanecen abiertas y grietas profundas, debido a una dictadura salvaje de casi 40 años, y así lo prueba el intento fallido del juez Baltasar Garzón (reconocido por su involucramiento en asuntos de Derechos Humanos), que en 2008 reabrió casos de crímenes de lesa humanidad durante la dictadura de Franco y ordenó la exhumación de 19 fosas, incluyendo la que se suponía estaba Lorca. La investigación fue cancelada por la Audiencia Nacional.

La familia de García Lorca se ha negado muchas veces a la exhumación de los restos del poeta, pero en 2009, a pedido de la familia de otras víctimas, se ordenó una excavación en la zona de Fuente Grande, Alfacar, donde supuestamente estaban los restos de Lorca junto con los de otras tres víctimas, y la familia dio su autorización. Con una inversión de 70.000 euros, financiada por la Junta de Andalucía, esta investigación fue muy infructuosa y lo único que se encontró en el lugar fueron rocas. 

Desde entonces, la familia de Lorca se ha mostrado todavía más reticente a autorizar su exhumación.

Sin embargo, con la justificación social e histórica de una búsqueda general de víctimas de la Guerra Civil Española, han habido otros intentos de localizar los restos del poeta.

En 2014 se condujo una nueva excavación en Peñón colorado, a menos de un kilómetro de las realizadas en 2009, pero tampoco fue exitosa.

En 2015, un libro de la autora Marta Osorio recopiló información que apunta a que el cuerpo del poeta fue trasladado después de ser enterrado.

Ahora, The Guardian informa que la investigación será retomada por la jueza argentina María Servini, siguiendo una denuncia realizada en abril por la organización española Asociación por la recuperación de la memoria histórica.

El caso de Lorca ha sido incorporado a la causa que la jueza Servini investiga en Buenos Aires por crímenes contra la humanidad.

Si sus restos fueran eventualmente hallados, y si la familia no autoriza su exhumación y el análisis mediante ADN, la identidad de los restos deberán ser determinadas antropológicamente, aunque no sería difícil, según han explicado antropólogos vinculados al caso, ya que Lorca está en una fosa junto a otra víctima que le faltaba una pierna, y él mismo tiene marcas reconocibles, como “un cráneo globuloso y un defecto en los pies”

Federico García Lorca escribió un verso, dedicado a Doña Juana la Loca, que dice así:

Tal vez finalmente se puedan hallar sus restos y tener también él una tumba de mármol, rezume tristeza o no. Sería justo.

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