5 sorprendentes cosas que debes saber sobre las pirámides de Guiza y el espectacular proyecto de escanearlas para conocer sus secretos

El proyecto se ejecutará con tecnologías no intrusivas, por lo que los expertos aseguran que ninguna de estas maravillas que forman parte del patrimonio más antiguo de la humanidad, sufrirá el menor daño. La idea es encontrar respuestas definitivas a dos inquietantes preguntas que siempre han suscitado las pirámides de Guiza: cómo fueron construidas y qué esconden.

5. Las pirámides a examinar

Las pirámides de Guiza se encuentran en la necrópolis del mismo nombre, la más grande del Egipto antiguo. La necrópolis se levanta en una meseta, cerca de la ciudad de Guiza, y sus tres grandes pirámides son las erigidas por los faraones Keops, Kefrén y Micerino.

Una de ellas es la Gran Pirámide, construida por orden de Keops y la única de las «Siete Maravillas» de la antigüedad que se conserva. Las pirámides comenzaron a edificarse en la época de la cuarta dinastía, hace más de 4500 años.

Estas monumentales construcciones han planteado algunas de las interrogantes más atrayentes en la historia de las ciencias. ¿Cómo fueron diseñadas con tanta precisión? ¿Cómo fueron cortados, transportados y levantados casi 150 metros los enormes bloques de piedra  que las forman? ¿Qué sorprendentes secretos guardan en sus profundidades inexploradas? Estas son las preguntas que intenta responder un equipo internacional, coordinado por el Ministerio de Antiguedades egipcio, que se ha dispuesto examinarlas valiéndose de los mejores equipamientos de alta tecnología disponibles.

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4. Las tecnologías a utilizar

Los expertos utilizarán tomógrafos infrarrojos y tomógrafos modulados, que hacen posible conseguir imágenes diferenciadas según los patrones térmicos de los materiales, lo que permitirá saber si el objeto en las profundidades es de madera, piedra caliza, lapislázuli u otro mineral; así como distinguir entre  hierro, bronce, oro, plata u otro metal.

La tecnología de muones también estará presente. Los muones son partículas que atraviesan los objetos y ayudarán a localizar cámaras ocultas y sus dimensiones. Los drones no podían faltar y serán utilizados para tomar cientos de miles de fotos y hacer las fotogrametrías del lugar. Aquí te dejamos un video con una breve noticia de los avances del proyecto.

3. El equipo internacional

Estará integrado por expertos franceses, canadienses y japoneses, supervisados por el Ministerio de Antiguedades de Egipto, quienes harán el trabajo de campo en 2016. En el grupo multidisciplinario hay científicos de varias especialidades, a excepción de arqueólogos.

Estos han sido desairados para tranquilizar a los egipcios y a toda la comunidad internacional, de que no aparecerá alguien con un pico y una pala a remover en los monumentos. Los expertos han asegurado que será una intervención totalmente no intrusiva, por lo que garantizan la plena conservación de estas portentosas obras. Después del Desastre de Tutankamon, al que nos referiremos al final de este artículo, cualquier precaución es poca.

2. ¿La maldición de Tutankamon a la espera de volver a atacar?

En los años 1920, los arqueólogos no contaban con tomógrafos, láser, escáneres ni drones y tenían que defenderse con tecnologías totalmente intrusivas, como el pico, la pala, el martillo y a lo sumo, como equipo no destructivo, una cámara fotográfica en blanco y negro.

Fue así como Howard Carter descubrió la tumba de Tutankamon en 1922, una intrusión que, según el mito, desencadenó la maldición que lleva el nombre del célebre faraón, supuesta causante de las muertes de varias de las personas vinculadas al hallazgo.

Posiblemente haya alguien preocupado por una posible maldición desencadenada por otro faraón que vea perturbado su reposo. Sin duda, no es lo mismo examinar una momia desde las alturas con un equipo digital que forzar su sarcófago y quitarle un poco el polvo de los milenios, pero esto quizá no tranquilice del todo.

1. Un proyecto en la mira después del Desastre de Tutankamon

Los científicos egipcios que coordinan el proyecto no están tan preocupados por la maldición de Tutankamon, como por el temor de que se repita algo parecido al reciente Desastre de Tutankamon. El objeto más valioso que se conserva del antiguo Egipto es la máscara de oro de Tutankamon, bajo custodia del Museo Arqueológico de El Cairo.

En octubre de 2014, un empleado del museo le despendió accidentalmente la barba a la máscara mientras cambiaba una bombilla quemada en la vitrina donde se guarda. Luego, el pánico del empleado convirtió el accidente en una catástrofe. Tratando de mantener el destrozo en el anonimato, pegó la barba a la máscara con un pegamento tan potente que es el que se utiliza en los aviones para unir partes sometidas a grandes esfuerzos.

Como no podía ser de otra manera, el trabajo fue bastante chapucero y la valiosa barba se agrietó. Ahora, un avergonzado Ministerio de Antiguedades está metido en un plan de restauración de la máscara y solo ruega que el proyecto de examinar las pirámides con tantos aparatos de alta tecnología no termine en un desastre similar o peor.

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