4 razones por las cuales querer censurar el canal de Eugenia Cooney es pura hipocresía

Eugenia Cooney es una youtuber y vlogger cuyo canal de Youtube existe desde el año 2013 y cuya producción abarca temas como la moda y la cultura pop. En sus videos, la joven hace tutoriales de maquillaje, se prueba vestimentas, habla de combinaciones y tendencias, y hace reviews de series de televisión o de videojuegos, entre otras cosas.

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Pero la atención que Eugenia Cooney está recibiendo últimamente tiene muy poco con ver con el contenido de su trabajo. Como muchas veces sucede con mujeres en los medios, la fijación sobre Cooney tiene que ver con su aspecto físico, ya que la joven es extremadamente delgada.

En relación a esto, una petición fue lanzada en Change.org, en la que se pretende hacer presión sobre Youtube para cancelar momentáneamente su canal. La petición pretende querer ayudar a la joven, cuyo canal tiene casi 895 mil seguidores, ya que se considera que Cooney influencia a las jóvenes que la miran. En más de un video (la temática no es nueva), Cooney niega tener una enfermedad, argumentando que su cuerpo es naturalmente delgado.

#4 Censurar a alguien por su aspecto físico (y no por sus acciones) no aporta nada bueno

¿Acaso Cooney está enferma? No lo sabemos. Probablemente sí. Sin embargo, la acusación de promover la anorexia es completamente errónea puesto que sus contenidos nada tienen que ver con esto. Por ende, la idea es que Cooney promovería la anorexia con su cuerpo, con su aspecto físico, sin importar lo que ella dice o hace.

La idea de que los cuerpos de las mujeres hablan a pesar de sí mismos es antiquísima. "Ella me provocó con su cuerpo". "Ella se lo buscó con su minifalda". "Puedes agarrarlas por la vagina". El hecho de que aún no se entienda que cuando una mujer dice "no", es "no", es prueba de esto mismo: "Si una mujer dice 'no', no importa, ya que su cuerpo me excitó, su cuerpo me habló y yo haré lo que quiera con él".

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Un solo artículo no alcanza para desarmar esta dañina idea patriarcal, que claramente juega su parte en lo que sucede con Cooney. Voy a limitarme a subrayar la incoherencia que reside en el hecho de pretender que el aspecto físico de una persona, por sí solo, promueve una enfermedad.

Para quienes se pregunten "¿Y qué hay de las modelos a quienes se critica por su delgadez?", les respondo que lejos estamos de lo que sucede en las pasarelas o revistas de moda, donde se busca aplicar medidas que limiten el peso escuálido de las modelos que ahí trabajan. El multitudinario y multimillonario negocio de la moda, en alianza con el mercado nefasto de las dietas y cirugías estéticas, se basa en la idea de que existe un cuerpo femenino perfecto que es tan deseable como imposible de alcanzar. "Nunca serás como estas modelos, pero te haremos creer que es necesario que lo intentes y que, mientras no lo hayas logrado, serás una abominación".

El resultado de esta cínica ecuación es millares y millares de dólares a beneficio de corporaciones super poderosas. Como ya dijimos, el canal de Cooney habla de maquillaje y videojuegos. Y no llega ni al millón de seguidores. La analogía es ridícula.

Querer censurar el trabajo de una persona en base a su aspecto físico (mantener un canal de Youtube es trabajo y representa una fuente de ingresos para muchos youtubers), es una acción tan hipócrita como errónea. Tal vez la intención sea buena. Sin embargo, como bien se dice, de buenas intenciones está empedrado el camino del infierno.

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#3 No lo haces para ayudar a una persona. Lo haces para controlar el cuerpo de otra persona.

Cuando se lee las secciones de comentarios de los videos de Cooney nos encontramos con una repetitiva retahíla de comentarios sobre la apariencia de la joven. Dicho sea de paso, este tipo de comentarios son generalmente nuevos, es decir, fueron publicados en horas y días recientes. Si vamos atrás en el tiempo, especialmente en los videos más antiguos de Cooney, la mayoría de los comentarios son sobre el contenido de sus videos: pedidos de consejos de moda, maquillaje, respuestas a sus videos, etc.

A continuación, un modesto resumen del tipo de comentarios "benevolentes" que últimamente inundan los videos de Cooney y que, claramente, van en la misma dirección que la petición que pide su censura:

"Lo hacemos por ti. Te estás matando a ti misma. Estamos preocupados por ti. Lo que haces no es sano". También le piden que postee videos de ella comiendo, o de lo que ella come, o cualquier cosa que pruebe que ella come. Porque "están preocupados por ella".

Leyendo estas cosas, no tengo dudas de que estas personas, que tanto se preocupan por el bienestar de una extraña, también publican mensajes similares en todos los demás videos de youtubers y vloggers que existen en la red: "Deja de pasar tanto tiempo en el ordenador, te hace mal, estás usando Internet para aislarte y no hacerle frente a tus problemas". "Deja de angustiarte tanto, te estás haciendo daño pensando constantemente en tus errores y defectos".

Mmm, tal vez no. Tal vez algunas enfermedades son más sexy que otras. Tal vez algunas aflicciones nos gustan más porque nos permiten hablar sobre el cuerpo de otras personas, sobre todo cuando éstas son mujeres. Si hay algo que, como sociedad, nos gusta, es comentar, controlar, criticar, manejar, moldear, deformar, tocar, violar, manipular, oprimir, humillar, y despreciar los cuerpos femeninos del mundo.

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#2 No hay que darle rienda suelta al complejo mesiánico de algunos

¿Qué es el complejo mesiánico del que sufren algunas personas? Podemos resumirlo de la manera siguiente: "necesito salvarte, y voy a salvarte, aunque no me lo hayas pedido, para sentirme mejor conmigo mismo".

Tanto en los comentarios en los videos de Cooney como en la petición online, encontramos a la madre de los comentarios-inútiles-hechos-a-personas-con-desórdenes-alimenticios, el muy viejo y querido "Por favor, ¡come algo!". Qué suerte pues, que alguien le propuso comer algo a Cooney o a cualquier persona que sufre de anorexia o bulimia, sino, jamás se les hubiera ocurrido que la solución estaba en comer.

¡Problema resuelto!

Por favor, come algo no es un comentario hecho desde la intención de ayudar a alguien para quien la comida se ha convertido en una fuente de tortura.  Por favor, come algo es un golpe brutal de insensibilidad y falta de empatía. La persona YA SABE que debe y necesita comer, pero NO PUEDE hacerlo. Por varias razones.  Por favor, come algo es un poco como ordenarle a un enfermo de cáncer "Por favor, elimina tus tumores". ¿Quieres ayudar a alguien que sufre de un desorden alimenticio? Te espera una tarea ardua que no se soluciona con atorar con comida a la persona enferma. Los desórdenes alimenticios generalmente son síntomas de dolorosos traumas que una persona está viviendo.

Repetimos: si Eugenia Cooney tiene una enfermedad o no, es un tema que nada tiene que ver con su canal en sí. Y, de todos modos, si cerramos el canal de Cooney porque "ella está enferma", cerremos también los canales creados por fumadores y por personas que ingieren demasiada comida chatarra. Si consideramos cerrar su canal porque "da un mal ejemplo", cerremos también todos los canales de personas que tienen adicciones, sean cuales sean, desde el café hasta al Xanax. Cerremos también los canales de aquellas personas que le roban dinero a sus amigos, las que engañan a sus parejas y las que tratan mal a las cajeras de supermercado. 

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#1 Primero te enfermo, luego te salvo. Soy un héroe.

Humilde resumen de toda esta situación:

Nos gusta ver mujeres delgadas en la televisión... hasta que se ponen tan delgadas que nos sentimos culpables y entonces hacemos todo lo posible para no verlas más. Mientras, nos convencemos de que estamos haciéndolo por su bien.

Primero te digo que estás gorda, que deberías perder algún kilo, que estás comiendo mucho, ¿no deberías hacer dieta?. Luego te obligo a curarte, come algo por favor. Me doy unas palmaditas en la espalda, reconfortado en el hecho de que soy una buena persona.

Primero te enfermo. Luego decido destrozar todo tu trabajo (llegar a casi 900 mil seguidores en Youtube implica muchísimo trabajo) porque he decidido que debes curarte. En ningún momento te pedí tu opinión en todo esto. Eres una persona enferma, no tienes opinión.

Primero te enfermo, luego te salvo. Soy un héroe.