Te ocupas de la decoración de la casa al detalle, pero olvidas un lugar fundamental: ¡el jardín! Define las plantas perennes que le darán vida a tu espacio exterior, considerando la exposición al sol, tipo de suelo e infinidad de especies que existen. ¿Lista para elegir?
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Juega con las formas. Combinar plantas con diferentes contornos es una excelente opción para la vista. Prueba con una mezcla de flores tipo campana, como ‘bleeding hearts’, estrelladas como el Iris Barbudo, y pomposas como las peonías.
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Estima los tiempos. No todas las plantas perennes florecen a la vez. Algunas, como la milenrama, salen a principios de verano; la lavanda se hace presente a media estación y las más haraganas, como las rudbeckias, recién aparecen al final. Elige un ‘mix’ que te permita tener flores toda la primavera.
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Visita el ‘garden center’. Cada temporada vas al ‘shopping’ a ver qué hay de nuevo. Con las plantas perennes debes hacer lo mismo. Recorre el ‘garden center’ para ver las flores cara a cara y define las que más te gustan. Esta es una selección que nos acercó Celeste Longacre, experta en jardinería.
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Monarda. Es la flor preferida de los colibríes. Mejor conocida como “bálsamo de abeja”, es una planta resistente que se propaga rápidamente y crece alto. Para su cultivo prefieren mucho sol y buen drenaje. Puedes elegirla en rojo, rosado o púrpura, para asegurarte un jardín lleno de picaflores.
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Rudbeckia. ¿Buscas una planta resistente? La rudbeckia florece desde mediados del verano hasta las primeras heladas de invierno, y es capaz de tolerar períodos de sequía. Es una flor parecida a la margarita, que atrae a las mariposas.
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Crisantemos. ¿La mejor noticia? No demanda cuidados excesivos. Asegúrate de ubicarla en un lugar luminoso, para que las flores se abran, y pulverízala frecuentemente para que las hojas y las flores estén frescas.
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Delphinium. Son plantas vistosas y altas, necesitan ser apostadas de forma individual por su tamaño. Prefieren un suelo bien drenado, rico y poroso, y un sitio resguardado del viento.
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Astilbe. Cuidado: estas plantas requieren sol y mucho espacio, ¡se trata de un arbusto que puede alcanzar los 3 pies (1 metro) de alto y de ancho! Son resistentes a temperaturas cálidas, y también aguantan bien los fríos, heladas y vientos fuertes.
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Equinácea. ¿Fanática de los productos naturales? Esta flor no sólo se cultiva como planta ornamental, sino que también es codiciada por sus propiedades medicinales. Su uso más frecuente es para ayudar a aliviar resfriados.
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Áster. Son parecidas a las margaritas, pero mucho más altas. ¡Presta atención, porque su estatura demanda un poco de apoyo! De lo contrario, un fuerte viento podría derribarlas.
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Phlox subulata. Una flor con presencia, de esas que dicen “aquí estoy yo”. Se esparce por el piso en ramas blancas, rosadas y violetas. No sólo es hermosa para la vista, sino que posee un perfume exquisito.