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Adornos para el Hogar

Jardín Zen, un rincón de paz en tu hogar

Publicado 7 Jul 2008 – 12:04 PM EDT | Actualizado 26 Mar 2018 – 10:34 AM EDT
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Los jardines Zen son una fuente de tranquilidad y energía, representan el camino de la vida y el del universo.

La tranquilidad que ofrece un jardín Zen se obtiene de las figuras que se van formando y los elementos que la integran. Esta se encuentra en la relación que cada objeto tiene y las reflexiones que despiertan en nuestro interior.

El Jardín Zen hace que nuestra mente descanse, concentrándola en un solo punto, logrando así despejarla de nuestros miedos, de la angustia y la ansiedad.

Los componentes que no pueden faltar en un Jardín Zen son:

Tierra y/o arena, que representan la plataforma sobre la que existimos, elementos que absorben y reciclan la energía. Estos elementos neutralizan las frecuencias nocivas, los pensamientos, las emociones, actitudes o las energías negativas.

Las Rocas, representan los obstáculos con los que nos enfrentamos en nuestra vida. Simbolizan las experiencias por las que transitamos y de las que aprendemos.

Los componentes concretos de un Jardín Zen son: cemento, arena de mármol, tres piedras, un rastrillo artesanal, y (según el modelo) puede tener velas.

Hacer senderos en el jardín Zen es una expresión de las diferentes situaciones a las que nos enfrentamos en el camino de nuestra vida.

El Zen proviene de los samuráis como una disciplina necesaria para hacer lo correcto en tiempos difíciles. Esta disciplina simboliza la calma, el vuelo de la mente, y la conexión con el alma.

Un Jardín Zen es un objeto ideal para conectarse con lo más profundo de nosotros mismos.

via | hogarzen

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