Justin Bieber no exageró cuando dijo estar harto de los 'selfies': un argentino pagó caro su intento

El pasado sábado, el modelo Mauro Leonel Ramírez cruzó su brazo por los hombros del cantante, sacó su móvil y antes del 'click', el canadiense sacudió su brazo con fuerza, tirando el teléfono al suelo.

Video Justin Bieber asegura no verá más a sus fans

El modelo argentino radicado en Los Ángeles, Mauro Leonel Ramírez, intentó sorprender a su hermana de 18 años con un ' selfie' con su artista favorito, el cantante canadiense Justin Bieber. Lo que recibió a cambio fue un manotazo que provocó que su teléfono celular cayera al piso y se quebrara.

"Solo quise conseguir una foto para mi hermana", dijo Ramírez en entrevista. " Ella se puso muy mal por la reacción de él y por haberme hecho pasar ese momento", afirmó el joven tras el incidente, ocurrido el sábado pasado.

El modelo coincidió con el cantante en un juego de fútbol y le regaló una camiseta del equipo argentino. " Ni siquiera gracias me dijo", publicó más tarde. Antes de que Bieber subiera a su camioneta, él se acercó. "Le pregunté si podía sacarme una foto (...) pero no recibí una respuesta". Así que cruzó su brazo por los hombros del cantante, sacó su móvil, que quedó en la cara de ambos y Bieber, con la camiseta en la mano, reaccionó, sacudió su brazo y terminó tirando el teléfono.

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Ramírez le reclamó que le había dado un regalo y el artista contestó "¡Gracias! ¿Lo quieres de vuelta?" y simuló devolverlo, pero se quedó con la pieza y se fue. Eso fue otra ofensa para él "como argentino", escribió. "Es mi bandera (...) La fama se les sube a la cabeza olvidándose de quiénes son. Más humildad y menos arrogancia porque así mismo como llegaste allá arriba también podés caerte", añadió en su página en Facebook.

Bieber, de 24 años, hizo público en 2016 que estaba harto de las fotos con los fanáticos en la calle y que ya no accedería a tomarse una más. "Ha llegado al punto de que la gente ni siquiera dice 'hola' o me reconoce como humano. Me siento como un animal de zoológico y quiero cuidar mi salud mental", publicó entonces en Instagram.


Pero Ramírez entiende que "su reacción no tiene justificación porque yo también pude haber reaccionado (de forma agresiva) pero no lo hice. Hay otras maneras de evitar y negarse". También ha recibido críticas de 'beliebers', seguidores del artista que defienden su respuesta y consideran que el acercamiento fue invasivo e irrespetuoso.

El modelo lleva cuatro años viviendo en Los Ángeles y también es conductor de Uber, por lo que su teléfono celular es esencial para generar ingresos, enfatizó.

Además, no es la primera vez que el artista gana la antipatía de argentinos. En 2013 visitó Buenos Aires como parte de una gira y arrastró la bandera del país por el suelo del escenario, no sin antes patearla en medio de la presentación. Una semana después actuó una vez más en la capital argentina y terminó el evento antes de tiempo, alegando que sufrió una intoxicación por algún alimento.