En las pasadas semanas, Marciana Galván Flores no podía comprender cómo todo el mundo preguntaba por su vecina, Rubí Ibarra García, y hacían “mucho alboroto” con la fiesta de 15 años de la joven, mientras que nadie se ocupaba por extenderle la mano a su hijo, Marcos Gallegos, quien desde hace ocho años espera por un trasplante de riñón, al que no había podido someterse por falta de recursos económicos.
Gracias a los XV de Rubí, su vecino Marcos recibe apoyo para un trasplante de riñón
La quinceañera más famosa de México "es un ángel que nos puso Dios en el camino" dijo su vecina, Marciana Galván Flores, quien había suplicado ayuda para su hijo.


Cuando supo lo que había ocurrido con el video que había hecho su vecino, el vendedor de chivas y prestamista Crescensio Ibarra, padre de Rubí, entonces Marciana Galván Flores permitió que un periodista grabara su mensaje a ver si así se viralizaba en las redes sociales y alguien ayudaba a su muchacho.
Decía que junto a su esposo había tocado todas las puertas y nadie les daba la ayuda. En un video tomado con un teléfono celular, Marciana Galván Flores se identificó y junto a su hijo y esposo contó su caso.
“Quisiera que me apoyaran para el caso de mi hijo Marcos, que está enfermo. Lleva ocho años en hemodiálisis”, dijo la mujer en el video donde lamentaba el revuelo que había armado entorno a Rubí, cuya familia tenía recursos económicos, mientras que a ellos nadie parecía querer darles la mano.
Sin nada que perder, suplicó a artistas, presidentes, políticos y periodistas “a ver si me voltean a ver”.
“Mi hijo está joven, tiene ganas de vivir, nada más que nosotros no tenemos los recursos para su trasplante”, dijo la mujer, que alegó haberle tomado dinero prestado al papá de Rubí, quien después acudió con insistencia a su casa hasta cobrarle con intereses.
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El video de Marciana y su familia no se viralizó. Sin embargo, fue ampliamente difundido y la ayuda para Marcos Gallegos ya está en camino. Si ni hubiese sido por el interés que generó el quinceañero de su vecina, nada hubiese pasado.
En los pasados días, mientras alimentaba los animales de los cuales está a cargo a cambio de un techo para su familia, Marciana Galván Flores expresó su inmensa gratitud tras haber recibido su milagro.
“ Le quiero agradecer a Rubí que por medio de su fiesta, gracias a Dios nos ayudó a nosotros que ya no sabíamos cómo hacerle con mi hijo, para que nos entrevistaran. Y le doy gracias a la gente y principalmente a Rubí, que es un ángel que nos puso Dios en nuestro camino porque necesitábamos quién nos sacara adelante”, exclamó.