Justice League vs. The Avengers: la influencia de Marvel y similitudes entre ambas películas

Justice League llega a los cines con la ardua tarea de sobrevivir al hype. Muchas esperanzas fueron depositadas en la película que reuniría a los superhéroes más icónicos de DC, adaptando, de esta manera, al primer equipo de superhéroes en la historia del cómic a la pantalla grande, con una clara misión: este debe ser el inicio de un camino de ascenso; y, afortunadamente, cumpió con su propósito. Sin embargo, para lograr esto sacrificó parte de su esencia como universo cinematográfico, manifestando similitudes pronunciadas con otra película de la misma índole, pero perteneciente a otra editorial y universo: The Avengers.

Imagen Vix

Con esto no estoy diciendo que haya sido una copia del film de Marvel Studios, estrenado en 2012 y dirigido, casualmente, por Joss Whedon —director encargado de los reshoots tras la salida de Zack Snyder, por motivos personales—. Es más, haber emulado ciertos aspectos del universo Marvel no es algo para criticar sino para admirar. Por esta razón, analizaremos algunos aspectos de Justice League que asimilaron la fórmula usada por The Avengers, y, además, discutiremos sobre la influencia de una de las leyendas de Marvel en el mito que sería usado como núcleo argumental.

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Chitauri y Parademons 

En ambos casos los equipos de superhéroes, formados a partir de un momento crítico, contra su voluntad y superando conflictos internos, intentarán combatir una amenaza alienígena externa. Para detener la inminente invasión que ocasionaría el final de la humanidad, los personajes deberían vencer a los soldados secuaces del invasor, quienes obran como peones en un plan mucho mayor: abrir un portal que extendería la invitación a un ser mucho más poderoso.

En este punto The Avengers mantiene ventaja por antigüedad y originalidad, aunque, por otra parte, la conclusión de Justice League es más lógica al no eliminar a todos los esbirros por casualidad y conveniencia al destruir la nave nodriza, por ejemplo.

La tonalidad y el humor

Desde el estreno de Man of Steel, el DCEU recibió duras críticas por su solemnidad, brutalidad y tonalidad; críticas que cavaron hondo en las mentes de los productores y creativos detrás de Justice League (y Wonder Woman), quienes, de alguna manera, moldearon su historia para conformar al público.

En Justice League el heroísmo clásico, cálido y simpático, con grandes dosis de humor y emotivos —pero poco arriesgados— actos de grandeza, toma predominancia. Barry Allen sirve de alivio cómico e incluso personajes como Batman, previamente retratados con oscuridad y cinismo, tienen tiempo para hacer comentarios jocosos y ser mentores para el inexperto. Desde esta óptica, Justice League aprende de sus errores, pero entrega parte de su sello característico en el proceso. Trata de ser amable para con todos y aceptado, mas no logra consistencia ni identidad.   

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El teseracto y las Mother Boxes

Lo mismo sucede con el vehículo argumental, o como diría un compañero: el MacGuffin de la historia. Las mother boxes son lo que el teseracto fue en The Avengers: un artefacto increíblemente poderoso, capaz de destruir la tierra de ser completado, pero que, a su vez, es parte de un artefacto (o concepto) mucho más peligroso. Si bien Justice League no tuvo el suficiente tiempo en pantalla como para desarrollar esta idea, pero por sí sola fue mucho más interesante que el teseracto. Ahora bien, si tomamos al teseracto como parte de un todo (Infinity Gauntlet), probablemente Marvel estaría en ventaja. Aunque… si pensamos en que las mother boxes anuncian la llegada de Darkseid, no sé, es difícil de comparar.

¿Rivalidad, inspiración, o trabajo en conjunto?

En ambos universos lo más importante es el dinero. Más allá de toda buena intención artística, es la taquilla lo que dirige el curso de los acontecimientos.

Zack Snyder, por ejemplo, trató de plasmar (con Man of Steel y Batman v Superman) su visión como fan de los cómics y concretar una serie de películas de nicho y referencias exclusivistas, que, lamentablemente, fracasó debido a procedimientos incorrectos y errores argumentales, pero que contenía grandes intenciones. La taquilla y la crítica no acompañó, y las dirección de Warner cambió de norte.

Más amigable, más familiar, más comprensible, más… rentable. De esta forma, el DCEU se acerca estrepitosamente a un formato que gana mucho arriesgando poco, pero que al menos nos asegura un futuro con muchas más películas de superhéroes; olvidables, quizá; poco controversiales y jugando a lo seguro, o no, debemos esperar y confiar expectantes, como lo hicimos con todos los films que precedieron Justice League y haremos con los por venir.

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La leyenda: Jack Kirby

Finalmente, me gustaría hacer mención de uno de los creativos de Marvel más geniales y menos reconocidos, quien, además de crear The Eternals y ser socio (casi mayoritario) en la elaboración de las más grandes leyendas en la historia de l a Casa de las Ideas, fue el responsable de New Gods, The Forever People y Mister Miracle, cómics poco comprendidos (algunos cancelados) pertenecientes a la metaserie Fourth World y considerados como obras maestras dentro del universo DC. De Fourth World— y gracias a Kirby—es que personajes como Big Barda, Orion, Highfather y el mismísimo Darkseid están con nosotros. Sí, sin este genio del cómic los conceptos de Apokolips, la Ecuación Anti-vida, las cajas madre y todo lo relacionado a Justice League no habría existido; lo que nos deja un curioso mensaje: la rivalidad entre DC y Marvel (sea en papel o en universos cinematográficos) son solo una justificación para nuestro deseo de conflicto. Aprovechemos la época en que vivimos y disfrutemos la era que considera a los superhéroes, sean de Marvel o DC.

Esperamos tus comentarios.

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