La historia de los orígenes de Wonder Woman nunca había sido plasmada en la gran pantalla, y la directora Patty Jenkins lo hizo adoptando un tono épico y entrañable que encajó a la perfección con lo que el público esperaba de la gran superheroína de DC Comics, la única capaz de disputarle en carisma y popularidad a sus compañeros Batman y Superman.
Esta escena de Wonder Woman fue recreada de la clásica serie de los 70

Wonder Woman se ubicó entonces como la película más aclamada y más exitosa del Universo extendido de DC, y todos sus logros y méritos ya han sido ampliamente comentados, pero todavía siguen saliendo a la luz algunos detalles muy interesantes de la película.
El homenaje a la serie
La figura de Lynda Carter y su versión televisiva de Wonder Woman sobrevolaban la nueva película de la princesa guerrera de las amazonas, que inevitablemente iba a entablar un diálogo con aquella antigua y legendaria encarnación de la Mujer Maravilla.
Patty Jenkins se las arregló para insertar un homenaje explícito a la serie que emitió la TV estadounidense entre 1975 y 1979.

«¡Es un hombre!»
Se trata del momento crucial en que la Princesa Diana encuentra a Steve Trevor en las playas de Temiscira, la irrupción de lo extraño y ajeno, que establece por primera vez la conexión definitiva entre el paradisíaco e idílico lugar de origen de Diana y el hostil y peligroso mundo real de los hombres, donde Wonder Woman será tan valiosa y necesaria.
Al igual que Ben Affleck, y antes Henry Cavill, Gal Gadot tenía que afrontar el desafío de crear una nueva versión de un personaje icónico, uno que ocupa un lugar importante en la cultura popular y el público asocia inmediatamente a diversos rasgos y características, incluso a diferentes encarnaciones previas.
Una interpretación que obliga al actor y también a guionistas y productores a alcanzar un delicado equilibrio entre la originalidad y la frescura, el respeto al canon y la fidelidad a esa difusa pero innegable esencia del personaje.
Gal Gadot y su versión de Wonder Woman cumplieron con todo esto, convirtiéndose de manera casi inesperada en el corazón del flamante Universo extendido de DC.

Lynda Carter admitió que cuando supo que habría una nueva versión live-action de Wonder Woman, su primera reacción fue de duda y preocupación.
Pero todas estas dudas se disiparon cuando conoció a Patty Jenkins y a Gal Gadot y supo que el personaje estaba en buenas manos:
«Después de mi primera conversación con Patty [Jenkins], sentí que había conectado con una mujer a la que podría acompañar por el resto de mi vida. Y luego conocí a Gal y es como si me hubiera tomado del otro brazo. Creo que las tres comprendemos realmente lo que se siente estar en la piel de Wonder Woman»








