Lo que puede ocurrir cuando quieres grabar tus grandes logros y mostrarlos en SnapChat

Subir el Monte Everest no es nada sencillo. Pocas personas han conseguido estar en la cima de una de las montañas más altas del mundo y luego vivir para contarlo.

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Sin duda, quienes logran conquistar el gigante natural de 8 mil 848 metros sobre el nivel del mar, no solo merecen ser felicitados, sino también condecorados por tal hazaña.

Cory Richards y Adrian Ballinger se atrevieron a subir y querían compartir cada instante de su aventura a través de SnapChat. Se prepararon física y mentalmente para esta travesía, pero también tecnológicamente.

A través de la cuenta EverestNoFilter, los alpinistas mantenían informados a sus seguidores sobre el trayecto y mostraron los paisajes que rodean la cumbre.

Cuando había alcanzado los 28 mil pies de altura, Ballinger regresó al campamento base, pero Richards continuó hasta el final.

Allí, en la cima, quiso usar su teléfono para contarle al mundo que lo había logrado, pero justo allí, su celular murió. Las condiciones extremas no le permitieron al montañista resolver el problema en ese instant e, así que guardó el equipo y comenzó su descenso para reencontrarse con su compañero.

Aunque el Snap cumbre fue fallido, el resto del recorrido pudo apreciarse. ¿Cómo lo hicieron? Ambos llevaron equipos que incluía 2 sistemas de Internet por satélite de energía solar que pueden conectarse por Wi-Fi y un montón de baterías para mantener los dispositivos con carga a lo largo del sendero.

Las temperaturas extremas y la atmósfera afectan a la tecnología, y es una pena que este caso no haya sido una excepción.

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