Además de ser uno de los más grandes científicos de la historia, Leonardo da Vinci fue un pintor excepcional. Pero esto no significa que todas sus obras surgieron de su mente tal cual las podemos ver hoy en día.
Leonardo da Vinci y los cambios drásticos en La Dama del Armiño
Por:Univision
Por más que su talento fuera enorme, da Vinci se tomaba su tiempo para concebir las ideas, e incluso las cambiaba a medida que iba pintando. Una demostración es La Dama del Armiño, una de sus obras más famosas, que ahora, mediante una nueva técnica, podemos conocer tal como da Vinci la pensó en un principio.
Se cree que esta pintura fue realizada entre 1489 y 1490, y muestra a Cecilia Gallerani, una mujer de la corte de Milán, Italia, quien fuese amante del Duque de Milán. Siempre se pensó que el cuadro contuvo desde un principio al armiño blanco, pero mediante una técnica de luz, el científico Pascal Cotte descubrió que hubo dos versiones anteriores de la pintura.
Método de Amplificación de Capas
Primera y segunda versión del retrato
Pascal Cotte utiliza el Método de Amplificación de Capas (LAM), una técnica que implica que la luz se refleje. Así descubrió que fueron dos las versiones previas de La Dama del Armiño: la primera no tenía al animal, la segunda tenía cambios en el vestido y agregaba al armiño.
Usando una luz intensa reflejada en la pintura, una cámara mide las reflexiones sobre los trazos para saber qué hay debajo. Así se pela la pintura como si fuera una cebolla, dice Cotte, de manera de saber lo que se hizo antes sobre el lienzo.
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¿Qué representa el armiño en esta pintura?
Según los expertos en historia del arte, el armiño no está allí porque sí, sino que tiene un significado específico. La pintura fue solicitada por Ludovico Sforza, el patrón de Leonardo da Vinci y Duque de Milán, a quien apodaban el armiño blanco.
Está claro que el hombre quiso colocarse a sí mismo junto con su amante preferida dentro de la pintura, pero de manera de que la alusión no fuera tan clara, dado que era un hombre casado.
La pareja tenía un deseo creciente de mostrarse juntos en público a pesar de que su relación no era permitida. El pasaje de un armiño oscuro y pequeño a uno más grande y fuerte es el deseo de Sforza por mostrarse masculino y potente.
El armiño representa también para da Vinci la pureza, dado que es un animal tranquilo y que come muy poco. La muchacha tenía en ese momento solamente 16 años y quizás ella misma pidió incluir al animal en la pintura. Lo importante es que este tipo de técnicas modernas ayudan a conocer el pasado de las obras de arte y las costumbres de los más grandes artistas.