Dos cuadros de Van Gogh robados en 2002 aparecen 14 años más tarde

La historia del arte está llena de historias de pinturas robadas. Desde la emblemática Gioconda, hasta el arsenal que robaron los nazis como cereza a la torta de horror que perpetuaron.

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En 2002 les tocó a Vista del mar desde Scheveningen (1882) y a Feligreses saliendo de la iglesia calvinista de Nuenen (1884) ser robados del museo en Amsterdam dedicado a Vincent van Gogh. 

“Ubicación desconocida”

Imagen Getty Images

Desde diciembre de 2002, cada galería online, cada referencia a cualquiera de estos dos cuadros culminaba con un “ubicación desconocida”, “paradero desconocido” o con cualquier otro compuesto gramatical que hiciera referencia a lo indeseable: los cuadros habían sido robados, no se sabía dónde estaban ni en manos de quién.

La Camorra

Es difícil no pensar en la mafia italiana cuando salen a la luz estos casos. Y esta vez los antagonistas de la historia fueron los miembros de uno de los grupos mafiosos más famosos: La Camorra.

Las dos obras valoradas en 90 millones de euros fueron sacadas por el techo del Museo Van Gogh y hoy, 14 años más tarde, fueron encontradas por accidente.

En un operativo que perseguía al grupo mafioso por tráfico internacional de cocaína, la Guardia de Finanza italiana se dio de cara con los cuadros que a fines de siglo XIX el neerlandés escupía sobre lienzos.

Los cuadros estaban en manos de los Amato-Pagano, clan de La Camorra que opera en el área metropolitana de Nápoles. Además de los cuadros incautados, fueron detenidos tres miembros del temido clan.

Y la lista sigue: 7 increíbles y valiosas pinturas que permanecen perdidas

Los cuadros

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Vista del mar desde Scheveningen

Sin sus marcos y con signos de daños menores, esas eran las condiciones de las dos pinturas al óleo que luego fueron pasadas a manos de expertos en arte, funcionarios del Ministerio de Bienes Culturales Italiano y del Museo de Van Gogh para que su autenticidad fuera confirmada. Y lo fue.

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Los daños menores aluden a partes donde la pintura se desprendió, sobre todo en la de 1882, y a deterioros en los bordes.

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Feligreses saliendo de la iglesia calvinista de Nuenen

Ejemplos de su etapa temprana como artista, Feligreses saliendo de la iglesia calvinista de Nuenen retrata la salida de la iglesia donde el padre de Van Gogh oficiaba de pastor y fue un regalo para su madre que no pudo asistir por haberse quebrado una pierna, y Vista del mar desde Scheveningen es literalmente una vista al mar turbulento de una parte de la costa de La Haya y que guarda, como tesoro, granos de arena que el viento incrustaba sobre el óleo mientras el artista pintaba.

Desde el viernes 30 de setiembre, y 14 años después de haber estado en quién sabe qué condiciones, los cuadros de Van Gogh vuelven al lugar de donde no deberían haber salido. Y agradezcamos a la suerte o al destino, que los daños fueron realmente menores.

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