5 hacks que vimos en el cine pero no se limitan a la ficción

Cuando nos enfrentamos a una película, inconscientemente solemos distinguir entre lo que nos parece real y lo que "obviamente es ficticio", generando una concesión con la obra para poder disfrutarla. Todos hemos visto escenas que son demasiado perfectas u oportunas para ser reales, y que nos hacen ver de forma demasiado sencilla cosas que, para los simples mortales, deberían sernos tremendamente complicadas.

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Lo que a veces desconocemos, es que incluso la más loca de las ideas en la ficción está de alguna manera inspirada en la realidad, y que muchas veces ignoramos que eso que nos parece imposible, realmente existe fuera de la pantalla.

Prepárate, porque a continuación te mostraremos 5 situaciones de hacking en películas clásicas, que aunque no lo parezca, realmente son posibles en la realidad y, a veces, con tecnología no muy sofisticada.

#5 Controlar un cajero automático

El sueño de muchos y el blanco de otros tantos... Tener un dispensador de dinero es algo sumamente tentador, sobre todo cuando se trata en última instancia de una computadora que, al igual que cualquier otra, puede ser burlada si tenemos el conocimiento suficiente.

Más de una película nos ha mostrado esta situación, siendo tal vez Terminator la que popularizó la "facilidad" con la que se logra tal hazaña, gracias al joven John Connor. En la realidad, hackear cajeros automáticos es algo extremadamente simple si se cuenta con lo necesario, ya sea para robar dinero, o para demostrar tus capacidades, reviviendo clásicos videojuegos.

#4 Alterar los semáforos

En una típica escena de persecución, nada mejor que bloquear el tráfico con un embotellamiento, provocado por semáforos descoordinados regalándonos su luz roja. Y es que modificar el comportamiento de los semáforos parecería ser bastante difícil, sobre todo cuando en muchas ciudades se tardan días en corregir algún mínimo desfase.

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Sin embargo, el mismo mecanismo sí fue usado como medida de protesta, en Estados Unidos. Bajo la consigna " Los Angeles is not going to be a fun place to drive" ( Los Angeles no será un lugar divertido donde conducir), manifestantes amenazaron con entorpecer la circulación bloqueando el funcionamiento de los semáforos, algo que podría resultar en una catástrofe siendo una ciudad tan poblada. De todas maneras, una búsqueda en Internet seguro nos dará más de una guía de cómo hackear semáforos, demostrando la vulnerabilidad del sistema.

#3 Robar autos con un teléfono móvil o laptop

Lo hemos visto en películas, y ahora también hasta en videojuegos como Watch Dogs. Hace unos años, hackear un vehículo hubiese parecido un chiste de mal gusto, puesto que lo más cercano era forzar la puerta o romper algún que otro vidrio...

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Hoy en día la tecnología nos golpea en la cara, y cada smartphone es una potente computadora, mientras que casi cada objeto que nos rodea tiene alguna vulnerabilidad informática. Robar un auto mediante un teléfono móvil o una computadora portátil sería algo que nadie nos creería, pero no deja de ser algo posible. Y lo mejor de todo es que no se trata de complejos sistemas ni pantallas con letras verdes en cascada... Basta con un par de mensajes de texto.

#2 Interrumpir la emisión de un canal de TV

Para comunicar un mensaje a toda una población nada mejor que viralizarse en las redes sociales... Pero en épocas en las que Internet aún no destacaba, la forma más efectiva era interrumpir la emisión de TV, y generar una especie de cadena nacional.

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Precisamente la película Hackers, así como V for Vendetta, han mostrado el poder que genera interceptar la señal de TV. Algo que también demostró quien se dio a conocer como " Captain Midnight", un ingeniero que saboteó la programación del gigante HBO. Otro caso aún más polémico y aterrador es el " incidente Max Headroom", del que incluso al día de hoy se desconoce a los responsables.

#1 Cambiar las calificaciones (u otros datos) en la secundaria

El sueño de todo alumno es lograr alterar las calificaciones en la base de datos de la escuela, de una manera tan sutil que ningún docente notaría. Obviamente, algo que hace a los protagonistas de películas bastante populares entre sus amigos, o en el caso de no compartir su secreto, al menos los dejan ver como aplicantes de una simple "travesura".

Más allá de todo, hackear ese tipo de datos sí es posible, y sí se ha hecho en varios casos. Aunque un poco diferente, ya que el benefactor suele pagar a quien realmente puede hackear el sistema (porque si podemos hackear pero no salvar un examen, no parece haber mucha lógica...). No parece ser el caso del propio Bill Gates, quien modificara los registros escolares para ubicar a las alumnas más hermosas de la institución en su misma clase, "como por arte de magia".

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¿Esperabas que todo eso que el cine hace ver sencillo con una computadora, de verdad fuese así?