Un viaje de locos en Californication [Crítica 6x06]

Presumo que la intención de este episodio de Californication fue juntar a todos los lunáticos, y no tanto, de la serie y ponerlos en un avión. Sabiendo que la altura y los lugares cerrados pueden hacer estragos en la mente de las personas, lo que quedó completamente demostrado en este capítulo.

In the Clouds nos muestra a Hank ( David Duchovny), viajando a Nueva York en el Air Force 69 de Atticus Fetch ( Tim Minchin) para presentar las canciones para el musical de "A Crazy Little Thing Called Love”. Junto con ellos Charlie ( Evan Handler), sufre de un terrible miedo a volar y Faith ( Maggie Grace) sorprende a Atticus, mientras que su mujer sorprende a Hank. Pero antes una pequeña intervención a Becca ( Madeleine Martin).

Volar es perjudicial para la salud

Nunca creí que podía llegar el día en que dijera que Hank era la persona más cuerda en una situación cualquiera, aunque siempre parece sorprenderme y demuestra su mejor lado. En este caso en particular, fue en un avión con un poco de turbulencia, donde todo lo que podía pasar pasó.

Dentro del avión, a varios metros sobre el nivel del mar, cada loco con su tema. Atticus estaba bloqueado, por lo tanto le pidió a Faith que hiciera su magia. Obviamente, totalmente rechazado, la insulta y Hank sale en su ayuda, pero durante la turbulencia que le siguió logró escribir un tema. Todos felices, hasta le miente a su mujer al explicarle que no la había drogado, de vuelta, y que le escribió una canción.

Charlie muy asustado se conecta con la viuda del rock star, que le ayuda a ver la verdad: sigue enamorado de Marcy. En el anterior episodio, se podía ver que algo había dado vueltas en su cabeza, que se podía interpretar como celos lógicos por el ex-marido, sin embargo había más y me gusta. Ahora, se dejó aprovechar, o ser abusado si se quiere, por la viuda que durante la turbulencia y el miedo a morir quiso que tuvieran sexo en frente de todos, aunque nadie prestó atención.

Hank no tenía muchas ganas de volar, pero la vió a Faith y decidió quedarse. Bien que lo hizo, porque gracias a ser caballero consiguió lo que siempre quiso, a ella. Algo que me gustó de todo lo que salió de la locura, fue que cuando pensó que iba a morir intentó llamar a Karen para decirle que la amaba, no salió muy bien porque no logró conectarse, aunque sí se conectó con la gran musa.

Una intervención sin éxito

Karen le pide que intervenga con Becca, por el asunto de la escuela y todas las cosas que quiere hacer o que realmente está haciendo. Sin ir más lejos, el buen padre se derrite en el momento que ella le dice que no tiene autoridad moral para retarla, porque es su ídolo y que quiere escribir como él. Es imposible que no salga como él después de todo lo que vivió y que quiera escribir sobre las mismas cosas.

Así que veremos cómo continúa el próximo capítulo, que con invitado especial, las cosas estarán centradas en Becca y no tanto en los problemas que siguen a Hank. Más allá de todo, me gustó como se dieron las cosas y cómo fueron resolviéndolas. Espero con ansias el que sigue.