Le llegó la hora del reciclaje a otro clásico de Disney: Aladdin. La casa de Mickey Mouse ha puesto en marcha la conversión a live action de sus historias más importantes, una que marcó su renacimiento a principios de los 90. Anteriormente, confirmaron la producción de Beauty and the Beast, The Lion King, The Little Mermaid, e incluso de la reciente Maleficent.
La versión live action de Aladdin ya tiene director y es una apuesta muy arriesgada


Ahora, los medios están confirmando que Aladdin se suma a esta lista, y ya tiene un director asignado. El hombre que asumirá el reto es el director inglés Guy Ritchie. Por supuesto que con Ritchie al mando, esta versión será completamente diferente a lo que todos tenemos registrado en el disco duro como Aladdin.
Se ha dicho que esta será una versión completamente diferente, aunque mantendrá algunos elementos musicales del animado de 1992. Esto tiene mucho sentido por dos razones primordiales. Primero, el aspecto musical podría servir para mantener los cimientos de la historia, además de conectar a los fans con una versión nueva apelando a la nostalgia. Por otra parte, debemos recordar que la versión de 1992 ganó Oscar por Best Original Score y Best Original Song con A Whole New World, un récord demasiado tentador para descartar.
Con Ritchie al volante, este live action podría tener mucha más intriga y acción de las que podríamos imaginar. Los antecedentes de este director hablan por sí mismos.

La franquicia de suspenso Sherlock Holmes con Robert Downey Jr. y Jude Law
La vibrante comedia de acción The Man From U.N.C.L.E.
Y su más reciente producción, el thriller épico King Arthur: Legend of the Sword
Sin embargo, más difícil que mezclar el musical con la acción podría ser emular la icónica interpretación de Robin Williams como el genio de la lámpara, la cual le dió una vida increíble al animado de 1992, y es sin duda un referente obligado de la historia.
Aladdin, live action, y Guy Ritchie, a simple vista parecen ingredientes difíciles de mezclar. Esta producción tiene todas las papeletas para ser un éxito rotundo o un desastre total. ¿Qué crees?
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