El Proyecto de la Bruja de Blair nos familiarizó con el terror de observar el footage perdido de algún crew que en su misión por crear un documental pierde la vida.
La película más gore del cine ocultó una oscura verdad durante 40 años


No obstante, casi dos décadas antes de esto, Holocausto caníbal (Cannibal Holocaust) ya había explotado esta idea con tal maestría que por un momento se le consideró una película snuff, es decir, un filme donde las muertes mostradas son reales.

Ante esto, el director Ruggero Deodato fue arrestado y condenado por asesinato, entre otros cargos que nacieron a raíz de esta polémica película.

Holocausto caníbal se estrenó en febrero de 1980 y nos sumergió en una de las historias más controvertidas del género del terror.
Este filme nos cuenta cómo el trabajo de un equipo de reporteros decididos a hacer un documental sobre caníbales en la selva amazónica se convierte en una sádica y terrible aventura descubierta por el antropólogo Harold Monroe.
Cuando Alan Yates, su prometida Faye Daniels y los dos camarógrafos, Jack Anders y Mark Tomaso desaparecen en la selva amazónica, Harold Monroe se adentra en esta jungla con la misión de encontrarlos.
Sin embargo, Monroe descubre que los jóvenes han sido asesinados. Lo único que queda de ellos son las grabaciones de su documental, la cuales muestran las atrocidades que los reporteros no sólo filmaron, sino también protagonizaron.

La brutalidad de las impactantes y violentas escenas ocasionó que Deodato fuera arrestado y condenado por obscenidad y asesinato. Este último cargo surgió debido a que los actores que mueren en el filme habían desaparecido en la vida real.
Deodato negó las acusaciones y explicó que los protagonistas habían firmado un contrato donde acordaban no aparecer en ningún medio durante un año tras el estreno de la película.

Además de argumentar con los contratos, los actores aparecieron ante los medios y este cargo fue descartado. No obstante, hoy, a 40 años del estreno, la película de Ruggero Deodato continúa generando polémica principalmente por las secuencias de crueldad animal, por las cuales el director sí tuvo que pagar una multa.

Durante el rodaje, existen varios momentos donde los chicos cometen actos terribles en contra de varios animales. Lo lamentable y condenable de estas acciones es que no se usó ningún tipo de efecto especial o truco, sino que las criaturas fueron asesinadas con el único propósito de producir la película.

En total siete animales sufrieron una terrible muerte: una boa constrictor es cortada por la mitad, una tortuga es decapitada y despojada de su caparazón, un coati es rajado por el vientre, un cerdo muerte por un disparo, una tarántula es matada con un machete.
Lo peor es que la escena donde un mono es decapitado fue filmada dos veces, lo que significa que se asesinaron a dos de estos primates.

Deodato también fue fuertemente criticado por la forma en la que trató a los pueblos indígenas del Amazonas. En ocasiones se le acusa de racismo y explotación, debido a que ninguno de los indígenas sale en los créditos y no retrata realmente las costumbres tribales de estos pueblos.

No obstante, el director explicó en una entrevista para The Guardian que todos ellos estaban conscientes que iban a ser retratados como caníbales.
«Por supuesto que entendieron que estaban siendo retratados como caníbales, pero es parte de su tradición. Es algo ancestral. Cuando tenían una batalla, el líder de la tribu que perdía era asesinado y comido por los ganadores. Es parte de su pasado. No lo niegan.»

Holocausto Caníbal causó tal controversia que tuvo una censura internacional que incluyó países como Italia, Reino Unido, Australia, Noruega, Finlandia, Nueva Zelanda, entre otros.
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