¡Cuánta nostalgia! 7 razones por las que siempre recordaremos a El Autobús Mágico

Si durante tu infancia aprendiste algo de ciencia, probablemente gran parte del mérito se lo lleve El Autobús Mágico, un increíble show de televisión de los 90 que nos marcó a muchos. Y si bien hoy lo recordamos con nostalgia, la buena nueva es que Netflix traerá de vuelta al programa pero en una versión moderna. 

Si bien desde 2014 se ha hablado de este proyecto, que incluso llevaría el nombre de  The Magic School Bus 360º, todo parecía haber quedado en la nada. Hasta que uno de los productores,  Stu Stone (quien también prestó su voz a uno de los personajes originales de la serie), confirmó a TMZ que el programa se está llevando a cabo. 

Así que puedes saltar de alegría, pues pronto podrás vivir nuevos episodios del programa infantil del que todos soñábamos con ser parte. Y para recordar lo mucho que nos gustaba, aquí tienes algunas razones. 

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1. La Señorita Rizos

Si bien cada personaje era único, la maestra era de los personajes favoritos de todos. Parecía un poco loca, pero su forma de ser era muy divertida. ¡Cómo olvidar la forma en que se vestía! Sus vestidos siempre se vinculaban al tema que iban a tratar en la clase. Así que no solo aprendimos de ciencia, sino también de estilo. 

2. Aprendíamos divirtiéndonos

Tal vez si nos hubieran dado un libro para leer sobre el sistema digestivo, lo habríamos dejado de lado en menos de lo que canta un gallo, porque nos aburría mucho. Pero aprender viendo El Autobús Mágico sí que era divertido. Sin darnos cuenta, nos llevábamos muchas lecciones de ciencia. 

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3. La diversidad

El grupo de estudiantes era muy variado, cada niño tenía su personalidad bien definida, y todos eran muy diferentes. ¡Y geniales! Así que nos enseñaba lo divertido que es ser diferentes al resto, y que no tiene nada de malo. La aceptación entre todos es un valor que siempre intentó dejarnos. 

4. Viajes en el tiempo

Algo que siempre nos atrajo de pequeños, e incluso ahora de adultos, es el hecho de poder viajar en el tiempo. ¡Y en esta serie sí que lo hacían! Lo encontrábamos fascinante.

5. Se transformaban en lo que fuera

La idea central de los episodios era transformarse en su objeto de estudio, o viajar hasta él, de modo de poder conocerlo a la perfección y estudiarlo mejor. En una clase eso podría sonarnos aburrido, pero verlo en un programa de televisión no dejaba que nos alejáramos de la pantalla ni un segundo. 

6. La mascota de la clase

¿Quién no quería tener a un reptil como Liz de mascota? Seguro que más de uno se lo pidió a sus padres. 

7. La canción

Debemos reconocer que la canción era demasiado pegadiza, y si hay algo que jamás pude olvidar, fue el opening del programa. ¡Y apuesto a que tú tampoco lo has hecho!

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¡Cuánta nostalgia! Ya mismo quiero que salga la nueva serie de Netflix, y mientras tanto, voy a mirar algunos capítulos viejos para recordar uno de los mejores dibujos animados de los 90.