Once Upon a Time ya lleva 9 episodios. Es una serie un tanto extraña que combina drama, cuentos de hadas y suspenso, pero que por alguna razón todavía me llama la atención y la sigo aunque parece una combinación de temas clásicos convertidos a una especie de policial y que llega de la mano de ABC.
Crítica de Once Upon a Time 1x09: True North

Había una vez...
El comienzo de la historia nos lleva al tiempo de los cuentos de hadas. Es el día de casamiento de Blancanieves y el Príncipe Encantador ( Ginnifer Goodwin y Joshua Dallas) pero nada va a salir como está previsto.
La Reina Malvada (interpretada por Lana Parrilla) anuncia una terrible maldición y desaparece, pasan los meses y Blancanieves embarazada va a pedir consejo a Rumpelstiltskin quién solamente puede confirmar lo peor: la maldición de la Reina se hará realidad y todos serán enviados a un mundo donde no hay finales felices. Pero hay una esperanza, la hija de Blancanieves, Emma, volverá a los 28 años y tendrá el poder para salvarlos a todos.
Así empieza, una historia que luego se traslada al Boston actual y donde una mujer llamada Emma tendrá que lidiar con el hijo que dio en adopción y del cual no quiere saber nada. Pero cuando se revele la verdad, y descubra que es la hija enviada a un nuevo mundo por el Príncipe Encantador, su deber de salvar a los habitantes de Storybrooke marcará para siempre su vida.
El verdadero norte
El último episodio emitido de Once Upon a Time lleva por nombre True North (El verdadero norte). Es el episodio 9 de la primera temporada y gira en torno a dos pequeños a los que Emma intenta salvar del horrible sistema de adopción de la ciudad de Storybrooke. Para hacerlo deberá encontrar al padre de los niños.

Mientras tanto, la Reina Malvada envía a Hansel y Gretel a robar un artefacto mágico de una competidora, una anciana bruja ciega.
Combinando fantasía y acción, Once Upon a Time se perfila como una serie peculiar, no pasará a la historia como la más brillante, pero por lo menos mantiene una identidad propia que hacen que el espectador quiera llegar hasta el final. Además soy fanática de Jennifer Morrison desde su paso por House.






