Cuando actores y directores de una película tienen que salir a explicar las motivaciones detrás de las acciones de los personajes y decirle al público que su interpretación es equivocada, es que algo anda mal.
Chris Pratt se suma a la defensa de Star-Lord y su estúpida acción en Avengers: Infinity War

Avengers: Infinity War sacudió al Universo cinematográfico de Marvel y se las arregló brillantemente para estar a la altura de las enormes expectativas que había generado, de la magnitud del evento que reunía por primera vez a todos los superhéroes de la franquicia.
Pero hay un momento en particular que ha dado mucho que hablar y ha generado el descontento del público, y tiene que ver con Star-Lord, el afable líder de los Guardianes de la galaxia.

Peter Quill es en cierto modo el culpable del catastrófico y trágico desenlace de Infinity War.
Es decir, obviamente que el culpable es Thanos, y Star-Lord incluso se cuenta entre sus víctimas directas, siendo uno de los desvanecidos tras el chasquido de los dedos con el guantelete del infinito.
Pero la derrota de Thanos era inminente en Titan y todo se podría haber prevenido, si no fuera por una acción impulsiva y radicalmente estúpida de Star-Lord, que afectado por la muerte de Gamora despertó al poderoso supervillano de su letargo bajo el influjo de Mantis y le permitió quedarse con su guantelete y, en definitiva, salirse con la suya.
Muchos fans quedaron sorprendidos y desconformes con lo que había hecho Peter Quill, pero Chris Pratt no está de acuerdo y ha ofrecido su explicación:
«Mira, el hombre vio morir a su madre. Vio a quien era para su figura paterna morir en sus brazos. Se vio obligado a matar a su propio padre biológico. Y ahora ha sufrido la pérdida del amor de su vida. Así que creo que reaccionó en un modo que es muy humano, y es justamente la humanidad lo que distingue a los Guardianes de la galaxia de otros superhéroes. Creo que si volviéramos a hacer la película cien veces no cambiaría ni un solo detalle de esto»
Ya los directores Anthony y Joe Russo habían defendido las acciones de Star-Lord, y habían dicho que se trataba de una decisión humana y «muy emocional».
Incluso los directores fueron un paso más allá y dijeron que «si algo enseñan las películas es a ponerse en el lugar de otro, a empatizar con un personaje y entender las decisiones que toma». Un argumento con el que cabe estar de acuerdo en general, pero en este caso es un poco malintencionado ya que desplaza la culpa al público por creer que la decisión de Star-Lord fue errónea y sugiere que esto se debe a una falta de empatía, y no a un error del guion.
Lo cierto es que son los propios guionistas los que traicionan al personaje.
Sabemos que son superhéroes falibles y humanos, que cometen errores y que sus acciones tienen consecuencias, y eso es en efecto lo que los hace tan atractivos y fascinantes; pero en este caso obligan a Star-Lord a tomar una decisión que no solamente es estúpida, egoísta y poco solidaria con los esfuerzos de sus compañeros, sino que no está a tono con el personaje que conocemos, no es propia de él ni de ningún héroe, por falible o humano que sea.
No es un simple error o una mera mala decisión, es una completa falta de juicio que nadie sería capaz de cometer, una renuncia voluntaria a las prioridades más inmediatas y evidentes, en un momento en el que la brutal amenaza de Thanos y todo lo que está en juego ya ha sido ampliamente establecido.
Los directores de Infinity War saben esto; saben que los guionistas torcieron momentáneamente la correcta caracterización de Star-Lord para llevar la trama hacia donde necesitaban; saben que la película no ofrece esas explicaciones fuera de pantalla que ellos después recordaron en declaraciones a la prensa (se le murió la madre, se le murió el padre, etc.); pero igual sugieren la falta de empatía de la audiencia.
Naturalmente, nada de esto importa demasiado, ya que de todas maneras todo lo que destruyó Thanos de una u otra manera se revertirá en Avengers 4. ¿O no?








