Breaking Bad: de vuelta al negocio [Crítica 5x09]

No era fácil para la serie y el equipo creativo detrás de ella estar a la altura de las grandes expectativas que se habían generado en torno al regreso de la temporada 5 de Breaking Bad, provocadas por casi un año de ausencia de la serie y por la tensión y el suspenso al final del último episodio (y, en gran medida también, porque es una de las mejores series de la televisión, claro está), sin embargo esta vuelta no sólo no defrauda, sino que incluso se podría decir que va un poco más allá y nos entrega algunos momentos inesperados y sorpresivos.

Mirando al futuro

En este episodio llamado Blood Money (“Dinero Sangriento”, que fue dirigido por Bryan Cranston), vemos, como ya es acostumbrado, mediante un gran salto temporal, imágenes de algo que sucederá presumiblemente sobre el final de la serie, vemos también a los personajes tratar de volver a sus vidas ordinarias y corrientes sólo para darse cuenta que no será tan fácil y vemos, por último, el enfrentamiento más esperado de toda la serie.

El flashforward del inicio de este episodio es una de las mejores aperturas de Breaking Bad en lo que va de la serie.

Es la continuación del momento que vimos en el primer episodio de la temporada, cuando Walter White ( Bryan Cranston) intercambió en un restaurante (luego de pedir el desayuno y confesar que era su cumpleaños número 52) algo de dinero por un auto con la maleta llena de armas y municiones.

Ahora llega a su casa, que está completamente abandonada, cercada, casi en ruinas y cuya piscina vacía es utilizada por unos jóvenes skaters. En la pared alguien escribió el graffiti “HEISENBERG”, por lo que ahora todo el mundo sabe quién es Walter. También Carol, la vecina, sabe quién es y de su pasado.

Al igual que en todos los flashforwards que se introducen en Breaking Bad, estos dejan muchas preguntas y desatan muchas posibles teorías, aunque casi nunca son acertadas. En esta aparición de Walt en su casa no sabemos exactamente a qué fue allí, para qué necesita el ricino que había escondido en la pared, por qué la casa está abandonada o dónde están Skyler ( Anna Gunn) y sus hijos. 

Un hombre a punto de morir

Volviendo a la actualidad, retomamos la serie exactamente en el mismo lugar donde nos había dejado el episodio anterior, para ver la reacción de Hank ( Dean Norris) ante el impactante descubrimiento. Hank, que ya antes había tenido algunos ataques de pánico, ahora vuelve a sufrirlos a causa del vértigo y de las intensas emociones, probablemente de rabia y confusión, que siente al enterarse que su propio cuñado es el criminal que tanto ha buscado. 

Es interesante que el enfrentamiento entre Hank y Walter no se haya extendido más. Cualquier otra serie quizás hubiera mantenido este aspecto sin solución durante algunos episodios más, tratando de centrar la expectativa y la tensión en cómo reaccionaría Hank y cómo haría para enfrentar a Walt.
Aquí todo se sucedió bastante rápido, aunque pareció un desenlace lógico e inevitable.

A lo largo del episodio vemos a Walter tratando de dejar atrás a Heisenberg, tratando de ocuparse del negocio familiar (y pensando en expandirlo), de llevar una vida normal y tranquila. Parece realmente dispuesto a esto, como se ve cuando aparece Lydia ( Laura Fraser) para pedirle que vuelva a encaminar el negocio, ya que la metanfetamina que están produciendo tiene una calidad de 68%.

Walter se niega y es muy probable que, lo que luego le dice a Hank, que es un hombre moribundo que simplemente se encarga de un lavadero de autos, sea realmente lo que quiere ser, la visión que tiene de sí mismo, ahora que su cáncer ha vuelto.

Pero Heisenberg comienza a aparecer poco a poco, quizás un poco obligado por las circunstancias. Primero le miente a Jesse ( Aaron Paul) sobre Mike, de una manera que resultó muy poco creíble.

Finalmente, cuando encuentra el dispositivo de rastreo en su auto, es Heisenberg quien nuevamente entra en acción para ir a enfrentar directamente a Hank.

La última escena, cuando Hank cierra la puerta del garage, fue todo lo impactante y emocionante que esperábamos de este enfrentamiento, y la línea final de Walt (“Si no sabes quien soy, entonces tal vez tu mejor opción sería andar con cuidado”) será sin dudas una de las más memorables de las serie.

Puntaje: 9.