Arrow: entradas triunfales [Crítica 2x14]

Después del parón casi obligatorio por la celebración de los Juegos Olímpicos de Invierno en Sochi (Rusia), las series estadounidenses poco a poco vuelven a su programación habitual. Arrow lo ha hecho con casi 2,5 millones de espectadores y un 0,9 en los demográficos, lo cual es un buen resultado para un buen episodio.

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El regreso de Lance y los celos de Felicity

El decimocuarto episodio de la segunda temporada de Arrow titulado Time of Death ha traído muchas novedades a las tramas de la serie. Así como la introducción de nuevos frentes que tendrán que desarrollar en los siguientes capítulos y que podrían ganarse el beneplácito de la audiencia.

[Contiene spoilers]

Imagen The CW

Por un parte hemos visto cómo Sara ( Caity Lotz) se empieza a aclimatar a su nueva vida sin tener que huir de la Liga de Asesinos. Está en Starling City, ha ‘vuelto’ con Oliver ( Stephen Amell) y tendrá que lidiar con su familia, aunque Laurel ( Katie Cassidy) al principio no está muy feliz por la labor de dejarla volver como si nada hubiera pasado.

Sin embargo la pena nos llega cuando ambos confirman su noviazgo, Sara-Canario Negro se incorpora a las filas de los ‘aliados’ de Arrow y Felicity ( Emily Bett Rickards) tiene que conformarse con las migajas. La vemos triste, en soledad y sin saber qué hacer para ganarse la confianza de Sara, de Oliver y de Diggle ( David Ramsey).

El Rey Reloj y Slade Wilson salen de las sombras

Pero Arrow nos ha traído otras muchas novedades. Hemos visto al nuevo villano de la segunda mitad de la temporada. Es ni más ni menos que Clock King o el Rey Reloj que interpreta Robert Knepper, un papel de malvado que le va como anillo al dedo. Solo hemos podido ver una pincelada de lo que quiere pero parece que le tendremos noticias suyas muy pronto.

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Sin duda el momentazo del episodio ha ocurrido al final. Las cosas entre Moira ( Susanna Thompson) y su hijo no pasan por su mejor momento cuando Oliver se entera del quién es el padre bilógico de Thea ( Willa Holland).

Imagen The CW

Es por eso que todos nos quedamos de piedra cuando vemos a Slade Wilson ( Manu Bennett) estrechar lazos (seguramente laborales, a causa de la campaña para convertirse en alcaldesa de la ciudad) con la matriarca de la familia. ¿Qué querrá a partir de ahora? ¿Cómo se desarrollarán los acontecimientos?

Puntuación: 8,5/10. Sin dudas un buen regreso de Arrow después de un pequeño parón. Cierra algunas tramas, abre otras y crea conexiones que no nos esperábamos como la relación entre Sin y Sara, donde la rubia, al no poder salvar a su padre (en la isla), prometía que cuidaría de su hija. Un momento conmovedor.