Wilson Fisk fue una de las cosas más disfrutables de una primera temporada de Daredevil que estuvo llena de ellas.
8 momentos claves de Wilson Fisk en la primera temporada de Daredevil

Este legendario villano de los cómics de Marvel es en la serie alguien con una presencia física imponente y aterradora, un hombre poderoso e influyente, que controla políticos, medios y autoridades, pero que además es capaz de tener un estallido de furia salvaje y asesina y utilizar la violencia con sus propias manos, sin mostrar ninguna clase de compasión.
Es también alguien con una cierta vulnerabilidad y varios matices, vinculados a acontecimientos de su pasado y su niñez, a su historia con Vanessa y a su relación con algunos de sus asistentes o con su madre, que lo hacen un personaje complejo y fascinante.
La interpretación de Vincent D’Onofrio —su forma de hablar y de moverse— lo dejan a medio camino entre el tono realista que campea a lo largo de la serie y la naturaleza de un supervillano proveniente de los cómics.
Durante los 13 episodios de la primera temporada de Daredevil tuvimos numerosos momentos destacados de Wilson Fisk (quien todavía no ha adoptado el seudónimo de Kingpin), de esos que definen al personaje y el rumbo de la serie, algunos de los cuales rememoramos a continuación:
Spoilers de la primera temporada de Daredevil
#8 El triste y solitario Wilson Fisk

La serie se tomó su tiempo para mostrar a Wilson Fisk por primera vez —aparece recién en el tercer episodio— y fue construyendo el misterio a su alrededor, con numerosas referencias a él pero sin mencionar su nombre: el mito del hombre poderoso, cruel e implacable que opera desde las sombras.
Sin embargo, cuando lo vemos por primera vez es algo muy diferente a la imagen mental que habíamos construido del personaje: está en una galería de arte observando con atención un cuadro que, como nos enteramos luego, lo hace sentirse completamente solo.
Esto —su soledad— comenzará a cambiar ya que en ese mismo momento conoce a Vanessa, la curadora de arte de la galería, que queda inmediatamente cautivada por este hombre que encierra un gran misterio.
#7 El salvaje y sanguinario Wilson Fisk
Un hombre que ha impuesto a todos sus subordinados la condición de nunca mencionar su nombre, que rara vez aparece en sus negocios y deja todo en manos de su hombre de confianza, que visita galerías de arte y reflexiona sobre sus sentimientos, es evidentemente una persona discreta y celosa en su ejercicio de poder.
Pero podemos sospechar también que es alguien que necesita estar todo el tiempo en control de la situación.
Cuando invita a Vanessa a cenar y uno de los miembros de organización rusa con la que hace negocios ingresa al restaurante vociferando su nombre y solicitando hablar con él, es evidente que este hombre ha quebrado varias reglas en el código de conducta de Fisk y ha cometido un error imperdonable. ¿Cómo reaccionará Fisk ante esto? ¿Cuál es el castigo que le impondrá?
Pues, tomar la situación en sus propias manos —literalmente— y golpearlo salvajemente hasta dejarlo semiinconsciente y luego continuar liberando toda la furia interior golpeándolo repetidamente con la puerta de un automóvil hasta desprender su cabeza del resto del cuerpo. ¿Este es el mismo hombre que miraba el cuadro en actitud contemplativa? Claro que sí.
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#6 El origen del Fisk que conocemos
Para comprender más cabalmente a Wilson Fisk tenemos que remontarnos a su infancia y a la figura de su padre, un hombre que no suena muy difícil de imaginar en la Nueva York de los 70.
Los flashbacks nos llevan a conocer a un Wilson Fisk de 12 años, el típico niño débil y vulnerable que a causa de su sobrepeso es abusado por sus compañeros. Su padre quiere que su hijo cumpla con el otro rol que le ha tocado en la vida, que se “haga hombre”. Esto es, en el esquema de valores de Bill Fisk, tomar cerveza y ser violento.
El pequeño Wilson albergaba en algún rincón de su humanidad el afán de arremeter contra toda esta violencia que recibía. Siendo su madre probablemente la única persona que alguna vez lo trató con cariño y respeto, que la lastimen es la gota que derramó el vaso.
Hay una inevitable y extraña sensación de justicia en este acto salvaje y asesino temprano e inaugural de Wilson, lo que no hace más que complejizar el hombre en que se convirtió.
#5 El primer encuentro con Daredevil
Posteriormente ya podemos ver en acción al Wilson Fisk más poderoso y manipulador, que lidera una operación ilegal junto a otros temibles y misteriosos líderes mafiosos, y elabora una estrategia para intentar matar dos pájaros de un tiro.
Wilson arregla un enfrentamiento entre uno de sus aliados, el experto ninja japonés Nobu, y el enigmático vigilante que ellos conocen simplemente como «el hombre de la máscara». Esto termina con Nobu muerto y con Matt Murdock tremendamente herido, al que Wilson Fisk casi logra eliminar definitivamente a fuerza de golpes de puño.
Este es el mejor momento de Wilson Fisk, en el que demuestra todo su poderío físico y estratégico, y uno de los puntos bajos en el camino de Matt Murdock hacia Daredevil, uno en el que sus emociones lo condujeron a cometer un error casi mortal.
#4 El Wilson Fisk “religioso”

Sabemos que en los momentos más duros y difíciles, en los que no parece haber una salida, la mayoría de las personas tienden a abrazar la religión, con la necesidad de creer en algo que permita prolongar aunque sea un poco más la esperanza.
Wilson no es un hombre religioso, aunque quiso serlo (“Intenté emular las palabras, el sentimiento, pero era todo falso, era una imitación de la fe”), así que su creencia, en la desesperación, cuando está a punto de perder a Vanessa, se reduce a lo único que sabe que tiene el poder de controlar y cumplir: él mismo y sus propias acciones.
Esto le dice a Vanessa cuando ella yace inconsciente en una cama de hospital:
“No puedo rezar por ti. Todo lo que puedo hacer es hacerte una promesa. Una que ni siquiera Dios, si es que existe, puede evitar que cumpla. La gente que te ha hecho esto, sufrirá”.
Todos sabemos cómo puede reaccionar Wilson cuando está enojado, así que esa última sentencia suena debidamente aterradora.
#3 El adiós a Wesley
El frío, calculador y extremadamente fiel James Wesley fue otro de los personajes altamente disfrutables de la primera temporada de Daredevil, y su muerte a manos de Karen Page fue impactante y sorpresiva, pero verosímil teniendo en cuenta las circunstancias en las que se dio: Wesley era más bien un negociador y una suerte de relacionista público de Fisk, y no un hombre que se encargara personalmente de asuntos como secuestros, intimidaciones y asesinatos.
Como en toda gran serie dramática, la muerte de un personaje no sólo sirve como momento de impacto y pérdida, sino también como disparadora de múltiples consecuencias y de diferentes formas de afectar al resto de los personajes.
La reacción de Wilson Fisk ante la muerte de “un amigo” fue crucial para conducir a la trama hacia el final de la temporada.
#2 Con mi madre no


Y una de las primeras consecuencias de la muerte de Wesley fue que Wilson descubriera la última llamada que éste realizó: su madre.
Tener un personaje con alzheimer ha permitido desde siempre a guionistas de cine y televisión apuntar la trama en cualquier dirección que uno quiera, simplemente haciéndolo olvidar o recordar cosas convenientemente. No resulta del todo convincente que hablando con Wesley la anciana haya recordado a ambas personas que la visitaron, pero hablando con su hijo sólo haya recordado a una de ellas, poniendo a Karen Page a salvo.
De todas maneras, la escena en que Wilson Fisk se presenta en la casa de Ben Urich es memorable por el monólogo de Wilson, la tensión inherente y el desenlace.
“Es mi madre la que metió en esto, señor Urich. ¡Mi Madre! Así que no estoy aquí para amenazarlo. Estoy aquí para matarlo”.
#1 Enfrentamiento final
Y como no podía ser de otra manera, toda la temporada condujo al clímax final, en el que pudimos observar ahora sí un épico enfrentamiento entre las dos fuerzas opuestas e irreconciliables de la serie y de Hell’s Kitchen. El héroe contra el villano, el bien contra el mal, la fuerza bruta contra la destreza física, el hombre que todo lo controla contra el hombre solitario y enmascarado.
La victoria fue para Daredevil, pero esto es algo circunstancial y pasajero. Como ya vimos, Wilson Fisk no es un hombre que se pueda dar por vencido tan fácilmente.
¿Qué otro momento de Wilson Fisk en Daredevil recuerdas?
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