7 errores médicos que aprendimos viendo televisión

Estamos tan acostumbrados a ver ciertas cosas en la TV que quizás en nuestra ignorancia pensamos que son reales, y es que se ven reales y suenan reales para cualquier persona que no tenga conocimientos médicos medios o avanzados. L

o grave del asunto es que si alguna vez nos encontramos en una de estas situaciones podríamos recurrir de forma errada a alguno de estos mitos que no son nada benéficos para nuestra salud.

Veamos algunos errores médicos que vimos en las series:

1. El cuchillo enterrado

Nop, no. En serio, no. Esta es quizás una de las cosas que más frecuentemente vemos en el mundo de los errores médicos de la TV. Mientras el cuchillo se encuentre dentro del cuerpo, hará las veces de un desagradable tapón que impedirá la pérdida de más sangre al retirarlo y dejar la herida vacía.

Esto no solo aplica para cuchillos, también funciona para dagas, estacas, flechas, vidrios y cualquier otro objeto punzo penetrante que debe ser retirado por un médico o paramédico, según sea el caso.

2. No, el desfibrilador no se usa así

Una escena clásica en los shows de TV es aquella en la que un paciente deja de presentar un latido cardíaco comenzando su viaje al más allá. Aquí es cuando entra el famoso desfibrilador en manos de un heroico médico que frota ambas paletas de forma frenética previo a aplicar shocks eléctricos a su paciente para traerlo a la vida.

Resulta que esto es no solo es un error sino que podría terminar de acabar con la vida de un paciente al que podría resucitarse con otros métodos. Este aparato solo se usa en pacientes bastante vivos pero que tienen un ritmo cardíaco irregular.

3. La resucitación cardiopulmonar

Este otro método es comúnmente usado, sobre todo en shows donde la víctima ha dejado de respirar, siendo bastante popular en episodios donde algún personaje ha sufrido algún tipo de accidente en el mar tragando agua en el proceso y que, luego de recibir este procedimiento por parte de un bronceado salvavidas, simplemente se ponen de pie y siguen disfrutando del sol. Eso no es así. Resulta que no solo es un método que cuya tasa de efectividad es bastante baja y que, además, resulta bastante doloroso debido a las compresiones que llegan a causar fracturas de costillas y otros daños internos.  

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4. Las balas dañan mucho... mucho más

El cuerpo humano es tan complejo y maravilloso que en cada parte de nosotros hay alguna arteria, hueso, tendón o músculo de gran importancia para el funcionamiento de fluido de nuestro cuerpo.

Los shows de TV parecen olvidar esto cuando de heridas de bala se trata no solo en aquellas escenas donde algún personaje recibe un disparo pero sigue luchando con bastante normalidad (la adrenalina dirán algunos), o cuando algún villano que en su huida es atendido por un veterinario sin mayores consecuencias, o hasta ese disparo “de advertencia” que no busca dañar de gravedad al blanco. Pues es poco probable que esto suceda en realidad, sobre todo en zonas del cuerpo como la parte superior de las piernas el torso o los hombros, que son las áreas de preferencia usada por los guionistas para las escenas antes descritas.

5. No eches tu cabeza hacia atrás cuando te sangre la nariz

En serio, no lo hagas. Quizás esto no solo se debe a lo que hemos aprendido viendo TV sino a un instinto natural que nos hace inclinar nuestra cabeza hacia atrás en un eventual sangrado nasal. El problema que al hacer eso, la sangre toma un nuevo un curso y se dirige a tu garganta, lo que podría provocar náuseas, irritación estomacal, vómitos y hasta el peligro de ahogarte en tu propia sangre.

6. Levantarse luego de una golpiza no es tan sencillo

A menudo vemos como un personaje se pone en pie rápidamente luego de recibir un buen puñetazo o hasta una completa golpiza. Esto, en realidad, no es posible (no, la adrenalina tampoco te salvará de esta). La realidad es que dentro de lo que puede salir mal, el peor de los escenarios sucede cuando tu cerebro sufre alguna contusión, daño cerebral irreparable y hasta hemorragia interna. No en vano, vemos con frecuencia como atletas profesionales, que se ganan la vida peleando, quedan tendidos en el piso como una alfombra luego de un golpe al rostro muy bien conectado.

7. Las picaduras de medusa y el mito de la orina

Hemos visto varias veces (?) la clásica e hilarante escena en la que alguien es picado por una medusa e inmediatamente algún amigo “caritativo” se ofrece a orinarle encima de la zona afecta gracias al mito de que esto ayuda a calmar el intenso dolor. La verdad es que lo único para lo que esto va a servir es para tener un recuerdo asquerosamente divertido entre un grupo de amigos cercanos. Los médicos recomiendan algunos otros métodos igual de desagradables pero efectivos como el vinagre y analgésicos orales para el dolor. A fin de cuentas, dicen los médicos, el mejor tratamiento para aliviarse de esta dolencia es el tiempo.

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