7 de las películas más misóginas de la historia

La misoginia se describe como el odio o desagrado por mujeres o niñas. Se puede manifestar de diversas formas: discriminación sexual, degradación de la mujer, violencia contra ella y objetivación de la imagen femenina.

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Hollywood es una máquina multimillonaria que, consciente e inconscientemente, ha proliferado una versión sexista de la mujer. Se le estereotipa en el mismo personaje, carente de actitudes diferentes a lo que está socialmente permitido.

Pero debemos hacer una distinción: algunos de estos filmes son sobre la misoginia, sin que eso signifique el director comparta tal idea (aunque no es excluyente). Otras películas pecan al mostrar a la mujer desde un ángulo completamente misógino.

Recordemos algunos de esos filmes más detestados por las mujeres. Esos que nacieron con la controversia bajo el brazo. Y que sirva para el debate: ¿se explota la misoginia o se muestra el mundo machista tal cual es?

I Spit on Your Grave (1978)

Tanto la versión original, filmada por Meir Zarchi, como el remake estrenado en 2012, han sido acusados de misoginia, aunque es la película del 78 la que se llevó el desagrado de la audiencia.

Jennifer Hills es la infame protagonista, quien es violada en múltiples ocasiones en una escena escalofriante, pues la audiencia observa cómo la joven es penetrada, lanzada a la tierra y golpeada por un montón de hombres. Y aunque la joven cobra venganza, esa escena persiguió al director por el resto de su carrera.

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The Killer Inside Me (2010)

Una adaptación controversial de una novela controversial. El director Michael Winterbottom fue señalado por sus largas y detallas escenas de violencia visceral, especialmente contra la mujer.

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Se le consideró como un ejercicio de pornografía y misoginia, especialmente la escena en la que el sheriff Lou Ford ( Casey Affleck) golpea, azota y tiene sexo con la prostituta Joyce.

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Breaking the Waves (1996)

Alguien me dijo que todas las películas de Lars von Trier son misóginas. Esto se debe a su tendencia de poner el peligro existencial a sus protagonistas femeninas.

Una de las más controversiales es Breaking the Waves, en la que la protagonista tiene que lidiar con su esposo, un hombre que sufrió un accidente laboral y quedó paralizado del cuello para abajo.

El hombre en cuestión incita a su esposa a que tenga sexo con otros hombres. Lo exige, de hecho. Entonces la mujer se encontrará con una serie de hombres (cada vez más violentos) en un predicamento al convertirse en una especie de prostituta por el simple placer de su pareja.

Death Proof (2007)

Tarantino fue recientemente acusado de misoginia por The Hateful Eight, un señalamiento que no le es ajeno, pues ya lo vivió con Death Proof. En esta película, Kurt Russell interpreta a un psicótico que disfruta matando mujeres con su coche.

Sucker Punch (2011)

Se vendió como una película de poder femenino, pero Sucker Punch realmente mostraba a un grupo de lolitas contoneándose para el placer masculino.

La historia se centra en un grupo de chicas encerradas en un prostíbulo y su única manera de salir es a través de un baile, donde la imaginación brilla y destruyen a sus enemigos con los mejores efectos especiales. La idea no era mala. Lo que el espectador no entendió era el uso de pequeñísimos vestuarios para llevar a cabo las tareas, los movimientos fetiche en las escenas de baile y las peleas y la objetivación del cuerpo femenino. Además, el dueño del club no dudaba en mostrar que era el dueño de las chicas y las degradaba constantemente.

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Por si fuera poco, en un final alternativo, se observa cómo Baby Doll (la protagonista) accede a tener sexo con un cliente, sin problema alguno, pues ello representa su salvación y entrega al burdel. Mala idea, Zack Snyder.

American Psycho (2000)

Patrick Bateman ( Christian Bale) es el psicótico que abusa mental y físicamente de las mujeres, las desmiembra con una sierra eléctrica y la cuelga en el clóset, como si se tratara de ropa. ¿Qué más misoginia que el trato de un asesino en serie?

In the Company of Men (1997)

En su estreno, In the Company of Men fue calificada como una de las películas más misóginas de la historia. Después llegó Lars von Trier… La película se centra en dos idiotas corporativos se encargan de destruir a su compañera de trabajo, una mujer sorda.

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