El risotto es un plato típico de Italia, y del que seguramente encontraras tantas variantes como personas que lo han preparado. En el caso de hoy te brindaremos la receta de risotto de brócoli y queso cheddar, una variante muy nutritiva pensada para 4 porciones, y especialmente sabrosa por el aporte de los dos quesos. ¡Anímate a prepararlo!
Risotto de brócoli y queso cheddar

Ingredientes:
- 1 brócoli
- 1 litro de caldo de verduras
- 1 cda. de mantequilla
- 1 cda. de aceite de oliva
- 1/2 cebolla blanca grande
- 1 diente de ajo
- 1/4 cdta. chile en hojuelas
- 250 g de arroz arborio (o cualquier arroz para risotto)
- 75 g de queso cheddar
- 15g de queso parmesano rallado
- 2 cucharadas de crema
- Sal y pimienta
Preparación:
Comienza cocinando el brócoli al vapor durante unos minutos. Cuando la flor esté tierna, retírala y resérvala en agua fría. Reserva.
Prosigue hirviendo el resto del brócoli por unos 6 minutos más. Luego retíralo y prepara un puré. Reserva.
Ahora pon a calentar el caldo de verduras a fuego alto, y cundo esté a punto de hervir, reduce a fuego bajo.
En otra hornalla coloca una olla y pon a calentar la mantequilla. Cuando comience a espumear, añádele la cebolla, el ajo y el chile, todo picado finamente. Cocínalos durante 5 minutos, o hasta que se doren levemente.
Ahora es el turno del arroz. Añádelo y déjalo que se cueza por un minuto. Agrégale el puré de brócoli, y revuelve un momento.
Ve vertiendo el caldo de verduras de a pequeñas porciones, removiendo luego de cada nuevo agregado. A medida que el arroz crezca, y si el caldo resulta insuficiente, puedes agregar un poco de agua para que el risotto se cocine bien y no se pegue.

Añade la flor de brócoli al vapor que habías reservado y remueve un poco. Deja cocinar por un par de minutos, y prueba tu preparado. Si no estuviera del todo tierno, continúa cocinándolo por un par de minutos más.
Inmediatamente después que retires tu risotto del fugo, agrégale los quesos rallados, la crema y condimenta con sal y pimienta.
¡Uf. Ya tienes tu rissoto de brócoli y queso cheddar listo. Es un poco trabajoso y debes prestar atención para que el arroz no se seque ni se pegue, pero no resulta un plato de difícil preparación.
Además, cuando los sirvas y veas la reacción de todos ante el primer bocado, ¡verás por qué valió la pena prepararlo!
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