El 30 de marzo de 1981 John Hinckley Jr., un estadounidense de 26 años, intentó asesinar al entonces presidente de Estados Unidos, Ronald Reagan. ¿Su objetivo? Impresionar a la actriz Jodie Foster, con quien estaba obsesionado.
Quedará libre hombre que en 1981 intentó asesinar al presidente Reagan para impresionar a Jodie Foster
Por:Univision
Luego de que su intento fracasara, Hinckley pasó 35 años en prisión. El 5 de agosto del 2016 quedará libre, por orden de un tribunal del hospital psiquiátrico donde se encuentra desde hace algunos años.
Obsesión enfermiza y un toque de masculinidad tóxica
Tal parece que todo empezó cuando Hinckley vio "Taxi Driver", película dirigida por Martin Scorsese, en la que el personaje principal, Travis Bickle (interpretado a la perfección por Robert de Niro) intenta asesinar a un candidato a la presidencia. Según el juez de la causa, Hinckley comenzó a sentirse identificado con Travis Bickle. Al mismo tiempo, se obsesionó de manera enfermiza con Jodie Foster, la actriz que interpreta a Iris, la prostituta adolescente a la que Travis intenta proteger y salvar de la vida callejera.
Hinckley procedió a acosar a Foster durante varios años, enviándole todo tipo de cartas románticas en las que le pedía que la actriz le diera "una oportunidad". También se inscribió en un curso de literatura de la Universidad de Yale luego de enterarse de que Foster, ya con 18 años, estudiaba en ese lugar.
En las cartas, Hinckley le prometía a Foster que haría un gesto suficientemente grande como para que ella se fijara en él y se ganara su respeto. Luego de un intento de atentado contra la vida de Jimmy Carter, presidente estadounidense de 1977 a 1981, Hinckley pasó a su siguiente meta: el presidente republicano Ronald Reagan.
Mata al presidente, quédate con la chica
¿Será que Hinckley absorbió sin pensarlo esa idea cultural de que los hombres deben impresionar a las mujeres con actos que demuestren "su fuerza"? Sea como fuere, en marzo de 1981, Hinckley se dirigó al hotel Hilton de la ciudad de Washington, donde el mandatario se encontraba luego de dar una conferencia de prensa, y le disparó seis veces.
Las balas hirieron a James Brady, secretario de prensa de la Casa Blanca, a un policía, y a un agente del servicio secreto. Reagan sobrevivió y recibió un solo impacto: una bala que se le alojó en el pulmón. Hinckley fue prontamente detenido.
Las cartas de Hinckley
"¡Adiós! Te amo seis billones de veces. ¿No te gusto ni un poquitito? (tienes que admitir que soy diferente a los demás). Eso haría que todo esto valiera la pena. John Hinckley".
Cualquier similitud con la noción cultural de que un "verdadero" hombre debe persistir en la conquista de una mujer aunque ésta diga explíticamente que no o aunque ésta no demuestre ningún interés en él, es pura coincidencia.
Libertad... con condiciones
Según el juez de la causa, John Hinckley Jr. ya no supone un peligro para la sociedad. Con 61 años de edad, Hinckley quedará libre el 5 de agosto, y pasará a vivir con su madre. Sin embargo, su libertad tiene una larga serie de condiciones. Entre otras cosas, no se le está permitido hablar con la prensa ni tener ningún tipo de contacto con Jodie Foster, la familia de Ronald Reagan ni ninguna de las personas heridas en su atentado.
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