Trump acusa a Obama de la expansión de la Mara Salvatrucha y promete arrestos y deportaciones

El presidente responsabilizó de la aparición de la pandilla "en ciudades por todo el país" a las "políticas migratorias débiles" del exmandatario, pese a que la MS-13 se formó en los ochenta y en el 2004 el FBI creó un grupo especial para luchar contra su violencia.

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Donald Trump acusó este martes al expresidente Barack Obama, sin ningún tipo de evidencia, de haber favorecido la expansión de la "mala" banda Mara Salvatrucha por Estados Unidos. En un mensaje en su cuenta de Twitter, el presidente aseguró que la pandilla consiguió formar grupos en las ciudades por el país debido a las "políticas migratorias débiles" de la anterior administración.


La inmigración fue uno de los temas principales que Donald Trump utilizó durante su campaña para alcanzar la Casa Blanca. En numerosas ocasiones, lo utilizó como un arma arrojadiza contra los demócratas y sin aportar pruebas, como cuando afirmó que millones de indocumentados habían votado en las elecciones para justificar que había perdido en el voto popular ante Hillary Clinton.

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Además, en sus actos de campaña, fue frecuente la presencia de familiares de personas que habían muerto a manos de inmigrantes indocumentados.

En esta ocasión, el presidente tampoco mostró ninguna prueba que sostenga su acusación. La MS-13 o Mara Salvatrucha en una pandilla criminal que efectivamente se encuentra diseminada por diversas ciudades en Estados Unidos, pero también en otros países, especialmente en Centro América y México.

Su origen se remonta a la década de los ochenta cuando inmigrantes salvadoreños se instalaron en Los Ángeles huyendo de la guerra civil. Iniciamente, el objetivo de la MS-13 era proteger a los inmigrantes salvadoreños de otras bandas ya existentes en la zona. Su crecimiento y la violencia de sus métodos supuso que las autoridades estadounidenses actuaran y deportaran a algunos de ellos, lo que supuso un reforzamiento de la organización gracias al reclutamiento de nuevos miembros en sus países de origen.

Ante esta situación, el FBI lanzó en diciembre de 2004 el Grupo de Trabajo Nacional sobre la MS-13 para investigar a esta pandilla criminal, cuatro años antes de la llegada de Obama al poder. Dicho equipo se "enfoca en aprovechar al máximo el flujo de información y datos de inteligencia, ocordinar investigaciones a nivel nacional e internacional, y ayudara a las autoridades estatales y locales a mejorar sus operaciones contra la MS-13", según se especifica en su página web. Dentro de su esfuerzo de lucha contra la pandilla, la agencia comenzó a colaborar con otros países para hacer frente a esta amenaza.

En el 2009, en Estados Unidos había entre 8,000 y 10,000 personas relacionadas con esta pandilla, según publicó el National Gang Threat Assessment.

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El comentario en Twitter del actual inquilino de la Casa Blanca se produjo casi al mismo tiempo que la cadena conservadora Fox News emitiía una entrevista con él. El presidente volvió a repetir que su gobierno ha expulsado a numerosos inmigrantes indocumentados aunque sin especificar si eran miembros de la Mara Salvatrucha.

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"Estoy hablando de inmigrantes ilegales que estaban aquí que han causado un gran número de crímenes, han matado gente, han violado gente. Cosas horribles han sucedido. Los estamos enviando fuera de aquí o los estamos metiendo en prisión (...) Es un problema muy serio y nosotros no hemos hecho nada sobre esto y ahora estamos haciendo algo".

Sus palabras llegaron un día después de que se supiera con la nueva administración se han duplicado las detenciones de inmigrantes sin antecedentes criminales.

"Una de las amenazas más graves"

Poco después de que Trump lanzara su mensaje por Twitter, el fiscal general anunció que el Departamento de Justicia va a aplicar mano dura contra las pandillas violentas. Jeff Sessions nombró a la Mara Salvatrucha en particular como una "de las amenazas más graves para la seguridad en Estados Unidos".

El fiscal general apuntó que las medidas impulsadas por el gobierno de Trump van a favorecer que caiga la actividad criminal de estos grupos. Asimismo, aprovechó para atacar a las ciudades santuario porque están "ayudando a estos carteles a ampliar sus miembros", según informó ÄP.