Baltimore se suma a la retirada de estatuas y símbolos confederados en lugares públicos

La ciudad de Baltimore (Maryland) retiró la pasada madrugada cuatro estatuas dedicadas a héroes de la confederación, días después de la violencia registrada en Charlottesville (Virginia) en una protesta de supremacistas blancos en la que murió una persona que se oponía a la marcha y una veintena resultaron heridas.

Pasada la media noche, operarios de la ciudad acompañados de la policía recorrieron distintos parques y plazas de la ciudad para retirar los monumentos, en torno a los que se concentraron pequeños grupos de personas.

El editor del diario The Baltimore City Paper, Baynard Woods, señaló en su cuenta de Twitter que el ambiente era de “celebración” y la operación, que fue documentando, se realizó sin incidentes.

Las cuatro estatuas fueron retiradas de su pedestal y llevadas a un lugar no revelado. Está previsto que la alcaldesa de la ciudad, Catherine Pugh, ofrezca una rueda de prensa este miércoles.

Tras la violencia del pasado fin de semana en la localidad de Charlottesville, que alberga el campus de la Universidad de Virginia, el Ayuntamiento de la Baltimore votó por unanimidad el pasado lunes retirar de inmediato los monumentos vinculados al bando de la Confederación.

La violencia en Charlottesville y la ambigua reacción del presidente Donald Trump ha generado protestas en todo el país, y ha acelerado la decisión de algunas ciudades de eliminar estos monumentos, que han sido objeto de discusión desde hace años.

Nueva Orleans retiró su última estatua confederada el pasado mayo. La retirada de las estatuas fue autorizada en 2015 pero no se había ejecutado ante los enfrentamientos entre los partidarios y detractores de un capítulo complejo de la historia estadounidense.

Un grupo de manifestantes en Durham, Carolina del Norte, derribó una estatua confederada frente a un edificio del gobierno el lunes por la noche, dos días después de los disturbios sangrientos de Charlottesville, Virginia.

La estatua, llamada el monumento de los soldados confederados, fue dedicada a la ciudad en 1924 y estaba colocada fuera de un edificio del gobierno que contiene las oficinas del encargado del condado y el abogado del condado.

Este fin de semana la tensión se traslada a Boston, donde se ha convocado otra jornada en la que están invitadas figuras de la derecha radical autodenominada ‘alternativa’. Las autoridades han indicado que tratarán de impedir el encuentro. Los organizadores se han distanciado de la violencia en Charlottesville y aseguran que seguirán adelante con la concentración.