El Bueno, La Mala, y El Feo
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¿Qué hicieron Carla, El Pelón y Andrés, en Chicago? Las aventuras del Bueno, La Mala y El Feo
Los locutores del show de radio más popular de habla hispana en Estados Unidos estuvieron de paseo y le pusieron mucho picante y humor a su visita a la Ciudad de los Vientos.
Todo parece que empezó por una chocobana que le dieron a Carla.
A ella le gustó el dulce, pero el Feo como que tenía ganas de probarlo.
Así que El Pelón lo ayudó para que se llevara un buen bocado.
Pero pareciera que El Pelón sufría al hacerlo...
Hasta que no se resistió más y se lo llevó a la boca.
Pero El Bueno, La Mala y El Feo también compartieron otro helado.
Esta vez fue uno normalito, que El Feo y El Pelón no soltaron nunca.
Todo era risas y delicioso helado, hasta que llegó el dueño del establecimiento a hablar de la cuenta que debían.
El Feo le hizo caer en cuenta al dueño del sitio que solo tenía poco dinero.
Por lo que de inmediato se puso El Pelón a organizar los fritos del local.
Mientras que El Feo agarró el trapeador y se puso a limpiar.
El Feo se llevó el trabajo más fuerte, pero por lo menos salieron sin deudas de la heladería.
¿Ahora qué habrán hecho El Pelón y El Feo, para que Carlita esté triste?
Lo que haya sido, quedó atrás y ahora Carla estaba feliz dándole comida al Pelón.
También hubo tiempo para selfies, pero El Pelón y El Feo no paraban de comer.
Carla dijo "foto con cara sexy" y miren con las que salió El Pelón.
Y ella no dejó de registrar en sus redes sociales la forma de comer del Feo.
Ahhh pero El Pelón también hizo comer a Carla una deliciosa dona.
Como siempre, Carla lucía espectacular.
Pero eso no fue todo. El Feo se encontró unos seguidores en otra tienda y se puso de bailarín.
Invitó al Pelón y juntos prendieron la fiesta con las radioescuchas de El Bueno, La Mala y El Feo.
El movimiento sexy del Pelón es una cosa ya característica que todos le piden.
Carlita no se quedó atrás y también se unió al baile.
El Feo siempre se roba el show con sus ocurrencias.
Y un pobre radioescucha no se salvó.
El Pelón y El Feo lo hicieron sentirse como el rey de la fiesta.
También hubo tiempo para los autógrafos de los seguidores.