El toloache es una planta arbustiva que se cultiva en México, Centro y Sudamérica que tiene alrededor de 12 especies y que, a través de los años ha tenido varios usos medicinales pero cuyos efectos pueden ser realmente dañinos para la salud. En inglés se le llega a conocer con nombres como pricklyburr, moonflower o hasta Devil's hornet - la trompeta del diablo.
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Seguramente has escuchado a tu mamá o abuelita decir que a alguien le dieron toloache cuando se ve perdidamente enamorado, confundido o cuando los traen "cacheteando la banqueta". Y es que justamente ése es uno de los usos más conocidos de la planta, a la cual se le atribuyen poderes para enamorar con locura a las personas si es tomado en forma de un té o poción.
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En muchos mercaditos, con brujos, hechiceros o curanderos o hasta en herbolarias, se puede encontrar toloache para realizar conjuros o amarres de amor. Supuestamente, la tradición narra que una bebida con una pequeña cantidad de esta planta puede hacer que alguien pierda su voluntad y no oponga resistencia ante el amor de quien lo pretende. Hay también quienes lo venden con todo y paquete de oraciones, instrucciones y recomendaciones de uso, para "asegurarse" que funcione.
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Se dice que la usaban hasta los aztecas, quienes la llamaban toloatzin, y le daban varios usos medicinales como por ejemplo analgésico para tratar heridas en la piel pero también estaban conscientes de que su mal uso podía acarrear efectos negativos como delirios y volver loca a la gente. También hay culturas de nativos americanos que la usan tradicionalmente para sesiones alucinatorias, mitotes y otros ritos de iniciación y pasajes.
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Hay algunas ceremonias entre comunidades indígenas como los huicholes o de nativos americanos que hacen ceremonias con el toloache con sus jóvenes. Cuando los chicos empiezan la adolescencia, entre los 12 y 15 años, toman una infusión de toloache y, al sentir sus efectos, es una manera de ritual de "iniciación" hacia su vida adulta, como miembros de su sociedad, pero siempre bajo la guía de un chamán o superior. Estas ceremonias están prohibidas en Estados Unidos.
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Por sus efectos alucinógenos, varias culturas prehispánicas también la usaban para sus "viajes astrales". De acuerdo a chamanes antiguos, la planta poseía el poder de transportar el alma hacia planos infinitos. Sus poderes particulares en el cerebro provocaban diferentes tipos de estimulaciones que resultan en fuertes alucinaciones que, para ellos, eran visiones del futuro con las cuales se podía realizar predicciones.
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Hasta estos días en algunas culturas y tribus mexicanas en zonas de sierras y selvas, su uso es frecuente no sólo en rituales como el mencionado sino hasta como ingrediente en comidas. Aunque conocen bien los efectos negativos y secundarios del toloache, para varias comunidades esta planta es como un "regalo del cielo" y rechazarlo sería un insulto.
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Pero también, si se sabe usar bien, tiene un gran poder medicinal, con propiedades analgésicas y anti-inflamatorias. Brujos y chamanes pueden convertir el toloache en lociones, pociones y ungüentos que aplican sobre la piel para curar heridas, aunque su uso es bastante restringido y en pueblos indígenas se encuentra a cargo de la persona con mayor autoridad, quien debe asegurarse que se prepare con cantidades seguras.
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Y es que, por más curioso o gracioso que suene el "te dieron toloache" para estar babeando por alguien, en realidad es una planta muy tóxica que puede producir desde vómitos o alucinaciones hasta taquicardias, dificultad para respirar, o incluso la muerte, por lo que médicos e investigadores no dudan en resaltar lo dañina que puede ser.
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Pero, ¿cómo es posible que sea tan peligrosa esta 'inocente' plantita? Este toloache es una planta linda a simple vista, con hojas puntiagudas que pueden desprender un fuerte olor desagradable, con una bella flor de forma cónica o de trompeta en color blanco y con tonalidades violetas o azules, dependiendo de la zona, y con una fruta espinosa.
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Por lo general del toloache se usa la raíz, la hoja de la planta y la semilla de la fruta, que es donde se encuentra la mayor concentración de atropina y escopolamina, dos alcaloides tropanos que causan delirios y alucinaciones. Se muelen y se preparan en infusiones o tés para beber, o en esencias para estos rituales tan peligrosos.
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Es interesante que la escopolamina, uno de los principales componentes de la planta, se ha usado de forma farmacéutica en diversos medicamentos para tratar padecimientos como el asma, la ansiedad o hasta la enfermedad de Parkinson. No obsante, su uso y efectos secundarios son cuidadosamente estudiados y controlados, ya que no es recomendado.
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El problema es que no se sabe todavía en qué cantidades es segura de ingerir, por lo que se recomienda no hacerlo en ninguna dosis, pues es muy peligrosa utilizarla y con efectos demasiado graves para los individuos. Si se toma una cantidad muy pequeña (aunque es difícil decir cuánto es pequeño, porque cada persona reacciona diferente) sus efectos son pasajeros, pero podrían afectar gravemente la salud si el uso es continuo.
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El toloache puede producir desorientación, angustia, falta de concentración, pensamientos incoherentes, una falta de distinción entre la realidad y la fantasía, dificultad para respirar que puede llegar hasta provocar un ataque cardíaco; en grandes dosis puede causar periodos graves de alucinación y psicosis. Los efectos pueden llegar a ser irreversibles.
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Lo preocupante es que su venta no está prohibida y es común en lugares como México, por ese mito de que puedes "amarrar" a alguna persona. La gente cree que con él resolverá sus problemas de amor, pero en realidad es porque estamos drogando a alguien y afectando su cerebro, causándole daños neurológicos que pueden ser hasta causantes de su muerte. Eso hace del toloache una planta muy peligrosa.