Números de la suerte del 24 de julio de 2022

Revisa cuáles son los números y horas que te darán suerte este domingo 24 de julio de 2022.

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Números de la suerte del domingo 24 de julio de 2022

Este domingo tenemos a la Luna menguante transitando por el signo de Géminis, también tenemos la vibración del 1, la del comienzo.

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La razón del número universal para hoy: día (24), del mes (7), en el año (2022), nos da una suma de 24 + 7= 31, que se reduce a 4.

Y después 2 + 2 + 2 del año 2022, que es = 6 por lo que 6 + 0= 10, que se reduce a 1.

Tus números de hoy:
Signos de fuego (Aries, Leo, Sagitario): 1, 13, 22, 51,
Signos de tierra (Tauro, Virgo, Capricornio): 3, 19, 47, 61
Signos de aire (Géminis, Libra, Acuario): 6, 15, 29, 70
Signos de agua (Cáncer, Escorpión, Piscis): 11, 28, 63, 90

Horas prósperas para:
Salud: 6:12 pm
Dinero: 3:15 pm
Amor: 12:25 am
Trabajo: 7:59 am

Normalmente es a Dios a quien le hablamos en nuestros rezos, pero también es importante saber que además podemos hacerlo, según la Biblia, a través de una gran variedad de ángeles, quienes sin lugar a dudas también están de nuestro lado para ayudarnos cuando lo necesitamos.

Nuestros ángeles son sumamente caritativos, pacientes y llenos de amor y adoración para nosotros los humanos. Normalmente saben qué nos preocupa ya que están a nuestro lado, asignados para asistirnos en lo que puedan, sin interferir en nuestro libre albedrío.

Según varios estudiosos de la religión y de la angelología, parte de la teología, en realidad hay una gran variedad de ángeles. Estas criaturas celestiales fueron creadas igual desde el inicio de la Tierra y se han separado en un par de categorías, los normales y aquellos ángeles caídos, como Lucifer, de los cuales no hablaremos.

Pero entre las jerarquías existen tres distintas, cada una con tres diferentes tipos de ángeles. Comenzaremos con la primera jerarquía, y entre ellos los más importantes son los
<b>serafines</b>, las criaturas más cercanas a Dios.

Los serafines tienen tres pares de alas. Con dos de ellas cubren sus rostros y con dos sus pies, mientras que con las otras vuelan. Se cubren en teoría para protegerse del intenso resplandor que emite tanto Dios pero también ellos mismos.

A estos serafines, considerados de la tan alta jerarquía celestial que otros seres divinos no pueden ni dirigirles la mirada, en realidad son cuatro. También tendrían apariencia de "serpientes de fuego" que, cuando deciden aparecerse en la Tierra, dejan esa forma animal para ser representados por humanos altos, delgados y con dotes celestiales.

En la primera jerarquía también se encuentran, debajo de los serafines, los
<b>querubines</b>. Estas dulces criaturas son las encargadas de guardar todo el conocimiento de Dios, así como las vigilantes de las estrellas y de la luz que nos rodea.

Arte ancestral religioso ha mostrado a los querubines como criaturas similares a esfinges, con cuatro pares de alas pero con rostro humano, muy distinto a los que estamos acostumbrados en la era moderna, como bebés robustos con alitas que usualmente vemos en el arte.

Estos querubines no se encuentran en el plano de la realidad humana, aunque sí fueron enviados para expulsar a Adán y Eva del Edén. Su luz divina se filtra del cielo y puede llegar a tocar e influir las vidas de los seres humanos.

Entre estos ángeles de más alto nivel dentro de la primera jerarquía están nombres como Zofiel, Rikbiel y Ofaniel, pero destaca sobre todo Lucifer, quien fue expulsado del paraíso y comúnmente llamado el Diablo.

Los terceros ángeles dentro de la primera jerarquía son los
<b>Tronos</b>. Ellos sí están relacionados directamente con la humanidad, ya que están encargados de registrar todas las acciones de los hombres, revisando quién ha sido bueno... y quién no.

Estas criaturas celestiales buscan un balance entre el cuerpo y el espíritu, el bien y el mal... y buscan el balance del control universal, cargando el trono de Dios. Se les representa como seres inmensos de alas circulares que reciben muchos colores con el espectro de luz.

En la segunda jerarquía de los ángeles tenemos otra trilogía, comenzando con los
<b>Dominios</b>, o
<b>Dominaciones</b>. Son como los ángeles "obreros" que reciben órdenes de serafines, querubines y hasta de Dios, además de supervisar a los ángeles inferiores.

Después en este mando intermedio de ángeles siguen las
<b>Virtudes, </b>a quienes se les representa como rayos de intensa luz. Ellos también supervisan a la humanidad mas no como individuales, sino en grupos de personas.

Los
<b>Poderes</b> o
<b>Potestades</b>, son los últimos de la segunda jerarquía de ángeles. Estos seres son los "agentes" del cielo y de la tierra, controlando los nacimientos y las muertes de toda criatura. Fungen también como asesores de religión, teología, ideologías y sobre el control de la conciencia e historia.

Finalmente, la tercera y última jerarquía de los ángeles comienza con los
<b>Principados</b>. Ellos trabajan como los mensajeros, guardianes de las naciones, guiando las relaciones interpersonales de los humanos. Son muy atareados ya que stán básicamente a cargo de la política y religión de cada pueblo.

Inmediatamente siguen los
<b>Arcángeles</b>, quizá los más conocidos por sus nombres, Miguel, Rafael y Gabriel. A ellos sí suele representárseles como humanos con un par de alas, por lo que de ahí se deriva la típica imagen de un ángel en la cultura popular.

Los arcángeles, como sabemos, son los que están mencionados en la Biblia y a ellos se les encomiendan misiones especiales para la humanidad. Son los intermediarios entre todos los mandos superiores y el resto de ángeles guardianes.

El arcángel Miguel fue nombrado príncipe después de derrotar al demonio y es el encargado de entrenar a las tropas de ángeles guardianes que acompañan a cada persona en el mundo.

Finalmente, están los
<b>ángeles</b>
<b>guardianes</b>, los de rango inferior pero los más cercanos a cada persona. Ellos protegen, guían y envían mensajes a la humanidad; son los auténticos intermediarios entre nosotros y Dios.

Los ángeles son como los obreros celestiales, son quienes tienen más trabajo porque somos nosotros los que los invocamos con nuestros favores y bendiciones. Todo aquel que crea en Dios y ore por Él recibirá los favores celestiales con su propio ángel guardián que nos mantenga a salvo de todo mal.

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Normalmente es a Dios a quien le hablamos en nuestros rezos, pero también es importante saber que además podemos hacerlo, según la Biblia, a través de una gran variedad de ángeles, quienes sin lugar a dudas también están de nuestro lado para ayudarnos cuando lo necesitamos.

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