Parece ser que cuando somos niños nada nos preocupa. No tenemos la misma presión ni problemas de nuestra vida adulta y mirando atrás, ¿cuántos no desearíamos ser ese pequeño o nena tan dulce o inocente que solamente quería jugar y soñar?
Shutterstock
PUBLICIDAD
2/21
Pero nada es para siempre, y mientras crecemos y nos adentramos a la vida adulta, vamos adquiriendo responsabilidades y obligaciones y vamos tomando más conciencia y dominio de nuestros actos.
Shutterstock
PUBLICIDAD
3/21
Con el paso del tiempo, este niño que fuimos se va escondiendo en lo más profundo de nuestro ser. Y al centrarnos en esta vida adulta, con rutinas y demás, vamos poco a poco olvidándolo o reprimiéndolo. Esa inocencia y gusto sencillo por la vida se va quedando atrás, cada día más...
Shutterstock
PUBLICIDAD
4/21
Muchas veces nos quedamos sin motivación, un poco aturdidos, cansados, sin saber cómo continuar o cómo comportarnos. Y es que hemos cortado lo más vital de nuestro ser, ese gusto por crecer, descubrir, aprender, de sorprendernos y maravillarnos por las cosas más sencillas y hermosas que nos ofrece la vida.
Shutterstock
PUBLICIDAD
5/21
En el niño que todos tenemos dentro vive toda nuestra autenticidad, nuestros deseos, ilusiones, la inocencia. Pero hemos ido dejándolo a un lado o renunciando a ello para "encajar" en esta sociedad adulta que muy probablemente nos aturde y agobia.
Shutterstock
PUBLICIDAD
6/21
La mayoría de la gente no se percata de la existencia de este niño interior, pero lo cierto es que en ocasiones es él quien determina cómo respondemos ante determinadas circunstancias en nuestra vida diaria.
Shutterstock
PUBLICIDAD
7/21
El punto es no desconectarnos de él, no olvidarlo y refundirlo a lo más profundo de nuestra mente; al contrario, he aquí como adoptarlo una vez más para despertar nuestra ilusión, espontaneidad y alegrías, signo por signo.
Shutterstock
PUBLICIDAD
8/21
ARIES Sueles ser muy impulsivo, explosivo y directo. Recuerda que puedes tener firmes tus ideales y misiones, pero no pases nunca por encima de los demás para lograrlos - y sobre todo, no pasa nada en mostrar vulnerabilidad. Sé más inocente y noble.
Shutterstock
PUBLICIDAD
9/21
TAURO Siempre has sido muy empático y humilde, desde pequeño, así que no te costará ningún trabajo centrarte en el amor, la paciencia y el relajamiento que has tenido desde niño. Respira profundo ante las adversidades y saca esa inocencia que siempre te ha definido.
Shutterstock
PUBLICIDAD
10/21
GÉMINIS Tu naturaleza carismática te ha ayudado a comunicarte bien con todo el mundo, pero debes ser más prudente con tus palabras y pensarlo bien antes de herir a alguien. Afronta tus responsabilidades si realmente quieres madurar y ser una persona más centrada.
Shutterstock
PUBLICIDAD
11/21
Además, siempre te has caracterizado por tu afán de conocimiento y descubrimiento. Conéctate con esa inocente alma que siempre has sido y vuélvete como una esponja, sacando lo mejor de cada circunstancia. De todo se puede aprender.
Shutterstock
PUBLICIDAD
12/21
CÁNCER Para ti será muy fácil conectarte con tu niño interno, ya que siempre has sido muy amoroso, dulce y maternal. Recuerda que a pesar de las circunstancias que te afecten en la vida adulta, tu corazón siempre ha sido y será de oro. Adóptalo y comparte ese amor que siempre te ha caracterizado.
Shutterstock
PUBLICIDAD
13/21
LEO Tu naturaleza empoderada siempre te ha hecho destacar y querer lo mejor para ti. Pero ahora es tiempo de ser más empático, sensible, de intentar tener un balance entre lo que quieres y lo que deseas, sin afectar a los demás.
Shutterstock
PUBLICIDAD
14/21
VIRGO A veces te exiges demasiado de ti mismo y particularmente, de la gente que te rodea. Recuerda esa inocencia y entrega que tenías de pequeño y sé más espontáneo, de espíritu libre y empático. No todo tiene que caber en una cajita; abre más tu mente.
Shutterstock
PUBLICIDAD
15/21
LIBRA Tú sabes perfectamente lo importante que es encontrar un balance ante todo y, si te sientes abrumado con las responsabilidades o temores de la vida adulta, eres el primero en buscar un remedio para estar más equilibrado y sano a nivel físico, mental y espiritual. No te costará trabajo reconectarte, lo verás.
Shutterstock
PUBLICIDAD
16/21
ESCORPIÓN Siempre has sido muy explosivo y apasionado, pero eso puede traerte muchas complicaciones en la vida. Lo que debes hacer para recuperar ese poder de tu niño interno es dejar de estar siempre a la defensiva y bajar la guardia. No todo debe ser cómo o cuando tú lo quieras.
Shutterstock
PUBLICIDAD
17/21
SAGITARIO Ellos no se pueden quedar quietos ni un momento, ni de pequeñitos. Son de naturaleza muy curiosa, energética y observadora. Si te sientes abrumado, recuerda justamente eso mismo, y que tu imaginación no tiene límites. Tú sabrás muy bien cómo salir de cualquier bache si te sientas a buscar la mejor salida.
Shutterstock
PUBLICIDAD
18/21
CAPRICORNIO Tú seguramente te abrumas ante cualquier problema que te saque de tu misión o te caiga desprevenido. Y es que seguramente has tomado o adquirido demasiadas responsabilidades en tu vida que poco a poco el peso en tu espalda ya es excesivo. Debes aprender a parar un momento y respirar profundo.
Shutterstock
PUBLICIDAD
19/21
Tan sólo así, deteniéndote y haciendo un examen de conciencia, podrás valorar lo que realmente importa. Y seguramente tendrá que ver con disminuir las presiones en tu vida, de disminuir tu carga o ritmo de trabajo y recordar que las mejores cosas no tienen precio - el amor y la familia.
Shutterstock
PUBLICIDAD
20/21
ACUARIO Tu naturaleza siempre ha sido juguetona, sociable y encantadora. No obstante, la vida adulta te ha llevado a ser un tanto perfeccionista y hasta a exigirte demasiado a ti mismo. Domina esos golpes innecesarios a tu alma que tú mismo te das y no seas tan pesimista o duro contigo mismo y tu entorno, relájate.
Shutterstock
PUBLICIDAD
21/21
PISCIS Tu alma tan sensible e intuitiva te ha llevado a llevar el corazón en la manga. Pero quizá estás muy clavado en tu pasado o un hecho anterior que no te está dejando avanzar o madurar emocionalmente. Déjalo ir. El pasado quedó atrás y ahí debe quedarse. Si no tienes la vista fija al frente, no podrás crecer como persona.