La clave está dentro de tu cuerpo. “Un factor importante para despertar fácilmente a la hora deseada es la sincronización de tu ritmo circadiano o reloj biológico”, explica en el portal Everyday Health el investigador del sueño Leon C. Lack. Empieza por planear tu cronograma de sueño la tarde anterior.
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¿Tienes niños? Ahorra tiempo valioso por las mañanas, preparando su ropa la noche anterior. Coordina el tiempo de baño y cepillado de dientes. Aprovecha mientras ellos desayunan para terminar de arreglarte.
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Ábrele la venta al sol matutino. Un estudio publicado en 2006 en la revista Current Biology encontró que las personas que se exponen a un poco de luz fuerte temprano por la mañana, están más alertas que las que no. Exhiben incluso una mayor actividad en las regiones cognitivas del cerebro.
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Mentalízate. Un estudio publicado en la revista Nature descubrió que al mentalizarnos para despertar a determinada hora, liberaríamos hormonas una hora antes, que nos prepararían para levantarnos incluso sin la necesidad de un despertador. ¿Qué tal?
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