La actriz de 41 años de edad inició su carrera artística en 1994 y poco a poco fue ganando mayor proyección al grado de protagonizar exitosas telenovelas como ‘Tres mujeres’ y ‘Niña amada mía’. Sin embargo, tras la muerte de su padre en 2009 decidió acercarse a la religión católica y sus creencias la llevaron a abandonar los melodramas.