Simon Bowes-Lyon, conde de Strathmore y primo hermano de la reina Isabel, pasará 10 meses en prisión, después de haber sido acusado por el Tribunal del Sheriff de Dundee en Escocia de entrar a la fuerza en el dormitorio de una mujer y agredirla sexualmente, según informó el portal de CNN. Los hechos ocurrieron en el castillo de Glamis, donde vive actualmente y el que fuera hogar de la infancia de la reina madre.
Otro escándalo en la familia real: primo de la reina Isabel es condenado a prisión por agresión sexual
A un año y tres meses del retiro del príncipe Andrew, hijo de la reina, por las acusaciones de abuso sexual en su contra y su presunta amistad con Jeffrey Epstein, la familia real británica está envuelta en otro escándalo. Simon Bowes-Lyon, primo hermano de la monarca, fue encarcelado por atacar sexualmente a una mujer.

Antes de escuchar el veredicto final, Bowes-Lyon ya se había declarado culpable de agredir sexualmente a la mujer, en una audiencia anterior.
Los hechos ocurrieron en febrero de 2020, alrededor de la 1:20 a.m. De acuerdo con el testimonio, ella había asistido al castillo escocés para participar en un evento de relaciones públicas que tendría una duración de tres días. Fue cuando ella se encontraba en su habitación, ya en cama, cuando Bowes-Lyon, quien estaba en estado de ebriedad, la convenció de que abriera la puerta y luego la empujó a la cama, la violentó y se negó a irse.
El alguacil Alastair Carmichael describió que Bowes-Lyon tomó a la mujer del pecho y los genitales, la empujó contra una pared e intentó levantarle el camisón. Mientras ella intentaba abrir la puerta, él la cerraba repetidamente; de igual modo, ella le pedía que se detuviera, lo alejaba de ella y le pedía que se marchara. "Todo lo cual ignoraste", dijo.
Carmichael agregó que cuando la mujer lo expulsó, él volvió y le suplicó que la dejara entrar. "Incluso ahora, un año después, ella todavía, ocasionalmente, tiene pesadillas y siente pánico por haber sido agredida sexualmente por ti", lamentó.
En un comunicado enviado a CNN por un portavoz de Bowes-Lyon, declaró: "Estoy muy avergonzado por mis acciones, que han causado tanta angustia a un huésped en mi casa. Cuando me di cuenta de lo que había hecho, me disculpé rápidamente con la mujer en cuestión. Pido disculpas de todo corazón hoy nuevamente, lamento profundamente mi comportamiento y la angustia que ha causado".
Simon Bowes-Lyon culpó al exceso de alcohol, aunque más adelante dijo: "Reconozco, en cualquier caso, que el alcohol no es una excusa para mi comportamiento".
La víctima de agresión sexual permanecerá en el anonimato, como una garantía que le otorga la ley británica.


















