Las pecas se volvieron un must inmediatamente después de la boda de Meghan y Harry. El orgullo con el que la duquesa mostró las manchitas que decoran su rostro la convirtieron en la representante de esta nueva tendencia y ahora, con su participación como responsable de Forces for Change de la edición británica de la revista Vogue, vuelve al ojo público como anfitriona de 15 creadoras de cambio.