Tatuajes "In memoriam": un homenaje distinto
Hablar de la muerte es algo que nos incomoda un poco a todos, de alguna forma u otra, aunque sepamos que es de las pocas cosas que seguramente todos tengamos en común: en algún momento nos moriremos. Y en algún momento de nuestra vida una persona cercana a nosotros, ya sea un familiar, un amor o un ser querido, muere. Y queremos expresar este dolor con una marca, por ejemplo un tatuaje.
El ritual de marcarnos para trasmitir lo que sentimos no es para nada nuevo. Muchas tribus utilizaban marcas para trasmitir su dolor o su adoración por algo (por ejemplo los indios Charrúas en América del Sur se cortaban una falange del dedo para manifestar el dolor que sentían ante la pérdida de un ser querido). Y un tatuaje puede ser (o no) un buen homenaje.
Generalmente el tatuaje consta de un símbolo que nos recuerda a la persona, algún escudo, un dibujo, las fechas de nacimiento y muerte de la persona, o simplemente el nombre. En algunos casos, incluso se hace el retrato, lo que ya sabemos no es para nada una buena idea.
Algo de todo esto es cierto: el dolor que sentimos por perder a un ser querido es intransferible. Por eso no estoy completamente seguro que un tatuaje sirva para trasmitir ese dolor. Aunque eso depende de cada uno... por algo tanta gente lo hace (habrá que ver si esto les ayuda o no).