La hija de Beyoncé es un clon de su mamá: en estas fotos parecen la misma persona

¿Estoy viendo doble? La hija de Beyoncé, Blue Ivy Carter, luce igual que su madre en una foto que la exitosa artista publicó en Instagram, comparando su aspecto a los 7 años con el de su hija, que hace poco cumplió los 7. En la imagen, Beyoncé escribió:

Alguien hizo esta comparación de mí a los 7 con Blue a los 7. Mi bebé está creciendo.

Blue no solo se parece a su madre en la sonrisa, los rizos y todo su físico. A su tan corta edad, la niña ha viajado por el mundo, participó de un álbum de su padre, Jay-Z, rapeando, y tiene su propio estilista. Esta niña será una fiera de mujer y ya lo estamos viendo.

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La imagen de Blue viene de una sesión de fotos con su madre: en ella, la cantante está usando un conjunto retro glam en el mismo estampado a rayas verticales tanto en la parte de arriba como en el pantalón. Todo combinado con unos enormes lentes de sol y esas ondas playeras que tan bien quedan en su cabello rubio.

Haciendo clic en la flecha a la derecha, en la tercera imagen se puede ver a Blue en un conjunto deportivo floral, también combinado, y unas zapatillas deportivas. Un estilo como el de una Beyoncé joven.

A los 7 años, la mayoría de las niñas deben su atuendo a sus madres; para Blue no es así, ya que tiene su propio estilista, Manuel Mendez, también asistente personal de la orgullosa mamá. El profesional habría comenzado a trabajar con la niña cuando ella tenía 20 meses.

Y tal como su madre, la niña sabe hablar por sí misma y expresar todo lo que tiene para decir. Jay-Z cuenta para el show de David Letterman que su niña siempre le dice lo que siente. «El otro día, le dije que se subiera al auto, porque estaba haciendo un montón de preguntas y teníamos que ir a la escuela», dijo el rapero, padre de tres, para el conductor del programa de televisión.

«Mientras estaba manejando, escuché una pequeña voz: “¿Papá?”. Me doy vuelta y ella dice: “No me gustó cómo me dijiste que me subiera al auto. Hirió mis sentimientos”.» A los seis años de la pequeña, su papá ya estaba orgulloso de ella. «Eso es lo más hermoso que me has dicho», le respondió a su niña.

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