Daisy Fuentes y Luis Fonsi tienen mucho que celebrar durante estas fiestas. La presentadora y modelo de origen cubano tiene que festejar su éxito en el mundo del entretenimiento, su carrera como empresaria y diseñadora y su regreso en 2015 como presentadora de La Voz Kids de Telemundo; mientras que Luis Fonsi debe celebrar su triunfo como cantante y ahora como juez de Yo soy el artista, su reciente matrimonio con Agueda López, los tres años de su hija Mikaela y el reciente lanzamiento de su disco 8, su octava producción discográfica.
Daisy Fuentes y Luis Fonsi dan gracias mientras regalan esperanza esta Navidad

A esto se le suma la labor que ambos artistas hacen por el hospital St. Jude, cuya misión es atender a los niños con cáncer y sus familiares sin costo alguno, y encontrar una cura para las enfermedades terminales que amenazan con cortarle las oportunidades a tantos pequeños en el comienzo de sus vidas.
Tanto Daisy Fuentes como Fonsi son portavoces del hospital y están comprometidos con su misión por muchos años. ¿Y qué los lleva seguir trabajando por esta causa? No te pierdas la entrevista que iMujer tuvo con ambos y entérate cómo ha cambiado sus vidas desde que se convirtieron en ‘ángeles’ de St. Jude.
Daisy Fuentes transformada por su trabajo en St. Jude

iMujer (iM): Llevas más de 15 años trabajando con St. Jude, ¿por qué la causa sigue siendo importante para ti?
Daisy Fuentes (DF): Es un honor ser parte de la misión de salvar vidas de St. Jude. La obra es de gran importancia a nivel mundial. Las familias que he tenido la oportunidad de conocer y sus increíbles historias de supervivencia siguen tocando mi corazón e inspirándome. Pero son los pacientes que no se pueden salvar los que a mí, y a todos, nos mantienen comprometidos con la causa de St. Jude. Cada vez que visito el hospital me saludan con felicidad, alegría, esperanza y agradecimiento; es lo que más recuerdo de mis visitas a St. Jude.
iM: ¿Cómo tu misión y el trabajo con el hospital ha cambiado con los años?
DF: Mi principal misión sigue siendo la misma: a correr la voz sobre el increíble trabajo que están haciendo en St. Jude. ¡Y este año me ha tocado hacer algo muy especial! Diseñé un hermoso collar para el catálogo navideño de St. Jude 2014. El diseño es uno moderno pero clásico, con un toque muy femenino. Una pieza de moda con un recordatorio positivo y muy importante, el de la esperanza. Lo diseñé imaginando que traerá paz y amor a todo el que lo lleve.

iM: ¿Qué es lo que te hace feliz?
DF: La vida me hace feliz. Yo soy feliz. Realmente no necesito mucho, pero me encanta y disfruto de todo lo que tengo. Saber que tienes una familia saludable y buenos amigos con quien disfrutar mi vida es todo para mí. Todo lo demás es solo el merengue en una torta ya impresionante, enorme y deliciosa.
iM: 3 deseos de Navidad para los niños de St. Jude y sus familias:
- Deseo que el cáncer infantil sea algo del pasado en los años venideros y que éstas las familias reciban la alegría que se merecen.
- Deseo que esta temporada de fiestas, las familias de St. Jude puedan olvidarse de esta enfermedad y disfrutar de una celebración llena de alegría, risas y tranquilidad.
- Espero que estos niños pueden ir y celebrar con sus familiares en cualquier ciudad, estado o país del que vengan.
Luis Fonsi quiere que Mikaela ayde a los demás

iM: Por qué decidiste comenzar a trabajar con St. Jude? Son ya 10 años
LF: Para mi es importante apoyar la misión de St. Jude, porque deseo que llegue el día en que ninguna familia tenga que sufrir la pérdida de un hijo, y en que los niños puedan vivir sin preguntarse si tendrán tiempo suficiente para hacer realidad sus sueños. St. Jude ha logrado tener un profundo impacto en las tasas de supervivencia de los niños diagnosticados con cáncer.
iM: ¿Cómo ha cambiado tu perspectiva de ayudar al hospital desde que eres padre?
LF: Ser padre es una bendición. Quisiera que mi hija comprenda lo importante que es retribuir. Trabajar con St. Jude a lo largo de la última década me ha demostrado la gran diferencia que puede hacer cada persona. Mi familia y yo hemos sido bendecidos por no haber sufrido en carne propia el cáncer infantil, pero sí hemos visto lo que esta enfermedad puede causar en otras familias.
Me conmueve y me llena de orgullo ser colaborador y vocero de St. Jude, y comparto este profundo sentimiento con mi familia. Deseo que Mikaela sienta que ayudar es parte de su esencia. Quiero que tenga ese sentimiento maravilloso cuando mire a otra persona a los ojos sabiendo que ha hecho algo, por más pequeño que sea, para ayudar a los demás.

iM: ¿Cómo crees que puedes seguir haciendo la diferencia para la institución?
LF: Para mí, todo comenzó con mi primera visita al hospital en el 2004. Desde el momento en que entré al hospital, me enamoré profundamente de la misión, el mensaje y el coraje de todas las personas de St. Jude. En esas salas, pude sentir la esperanza que transmitían las familias, los médicos y los propios pacientes.
Cáncer es una palabra difícil, hasta nos cuesta decirla. Pero estando en St. Jude, ves la enorme esperanza que tienen las familias y el alivio que sienten por estar en un lugar donde los médicos y científicos están realizando descubrimientos increíbles que ayudan a elevar las tasas de supervivencia.
También uno sabe que sienten alivio porque las familias de los pacientes nunca reciben una factura de St. Jude por su tratamiento, transporte, hospedaje o alimentación. Porque en St. Jude las familias se dedican cien por ciento en ayudar a sus hijos a vivir.
iM: ¿Cuál es tu mayor expectativa con respecto a tu asociación de este año con el hospital?
LF: La experiencia que más disfruto es regresar cada año a Memphis, Tennessee, donde está ubicado St. Jude, para filmar el último comercial para televisión que forma parte de la campaña nacional Thanks and Giving de St. Jude, una compaña anual que se realiza en la época festiva con el fin de recaudar fondos para el hospital y generar conciencia acerca de su labor, en la cual se pide a la gente que “Agradezcan la salud de sus niños y ayuden a aquellos que no la tienen”. Durante mi visita, tengo la oportunidad de ver a muchos niños, familias y médicos que, a través de los años, han llegado a ser mis amigos, y me entero de sus increíbles avances y hallazgos de investigación. Justamente, estuve en Memphis a mediados de agosto para filmar el último comercial con Jorge, Elías y Olivia, pacientes de St. Jude.
Los años que llevan estos dos famosos trabajando como voluntarios para St. Jude reflejan el cambio que esta labor ha hecho en los dos y las ganas de regalar esperanza a los que por causa de la enfermedad la hayan perdido. Nos unimos a Luis Fonsi y Daisy Fuentes para desearle lo mejor a los niños de St. Jude y sus familias y que el nuevo año venga lleno de mucha salud. Si quieres saber cómo ayudarlos en esa causa, puedes visitar la página del hospital St. Jude.








