Astrofotografía: 5 trucos para tomar las mejores fotografías del cielo

Es imposible no sentirse impresionado con imágenes impactantes del sol, la luna y cualquier cuerpo celeste que podamos imaginar. El cielo, en sí mismo, es un espectáculo que podemos disfrutar todos los días.

Si tienes la curiosidad de saber qué es lo que necesitas para retratar nuestra bóveda celeste, no te puedes perder estos trucos.

#1 Familiarízate con la cámara

Antes de postrarnos en el césped a retratar el cielo, primero debemos verificar el equipo que contamos para ello. En este caso, lamentablemente, no nos resultará útil nuestra cámara compacta. Para esto, es necesario contar con un equipo un poco más especializado.

En el mercado existen cámaras tipo bridge o semiprofesionales y profesionales. Puntualmente en el caso de las cámaras profesionales, hay de tipo réflex que cuentan con una serie de lentes que permiten la captura de imágenes con un acabado más pulido.

¿Qué es lo importante que debes saber al manejarla? Al estar en contacto con una cámara de este estilo, hay que familiarizarse con tres conceptos clave: Obturación, diafragma y exposición. Lo explicaremos paso a paso:

Exposición: La luz de las estrellas es bastante débil, por lo tanto, debes esperar una cantidad de tiempo considerable para que estas puedan ser capturadas. Tu cámara tiene que estar apoyada en un trípode para que este proceso de realice sin problemas. De no contar con una base firme, tu foto saldrá desenfocada.

Diafragma: El diafragma funciona como el iris de nuestros ojos. Se abre y se cierra regulando la entrada de luz. Mientras más cerrado esté el diafragma, se capturará mejor los detalles que queremos retratar; de lo contrario, al estar más abierta, se obtienen el efecto contrario. Lo importante es encontrar un punto medio con el que nos sintamos más cómodos.

Obturación: Siguiendo con los símiles, el obturador funciona como una especie de cortina que permite o no, el paso de la luz. Mientras más tiempo esté abierta esta especie de cortina, se capturará mejor el objeto que deseamos. Por su puesto, esto tiene que ir de la mano con el diafragma ya que ambos elementos trabajan apoyándose entre sí.

En la mayoría de los casos, estos valores se encuentran de manera automatizado pero es recomendable conocer y explorar estos modos porque los resultados son increíbles.

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#2 Dispositivo esencial: El trípode

Sí, la cámara es el elemento principal pero el trípode, como hemos mencionado anteriormente, esta armazón nos dará el sostén que necesitamos para sostener nuestra cámara. Debido a que son fotos que necesitan larga exposición, es importante contar con estabilidad, no lo olvides.

#3 Fija un punto en específico

Bien, ya tienes todos los elementos y ya conoces los conceptos que necesitas para tomar fotos, entonces, es momento de salir y capturar.

Ubica la cámara en un punto específico en el cielo y pon a trabajar el obturador y el diafragma. Como dijimos anteriormente, es importante tener paciencia.

Es este punto, cabe acotar que, para guiarte de mejor manera, enfoca la cámara hacia la estrella Polar. Será el inicio para tus fotos del cielo.

#4 Plantéate retos

Este ha sido el primer paso pero, seguramente, ya estarás pensando en el próximo reto. Lo primero que se nos viene a la cabeza es retratar el sol. Si quieres lograrlo, debes estar atento ante la intensidad de luz que reciba tu cámara, por lo que es recomendable que uses filtros o que tomes la foto apoyándote de otros elementos del entorno como árboles, edificios, etc.

Por el contrario, si deseas hacer este proceso con la luna, lo ideal es que también trates de ubicarla en un contexto que diferente y dinámico. Por el contrario, si eres de lo que desea capturar las texturas de la superficie de este satélite, es preferible que no lo hagas durante la luna llena, ¿por qué? Por la cantidad de luz que hay lo que te impedirá fotografiar lo que deseas.

Si buscas una guía más especializada, la tabla de este enlace será de gran ayuda.

#5 No olvides el Iso/Asa

Antes de las cámaras digitales, dependíamos de rollos de película para tomar nuestras fotos. Gracias a ello, se diversificaron a tal punto que permitieron establecer tipos de sensibilidad ante la luz. De allí surge el término Iso/Asa que son eso, medidas que también trabajan en conjunto con el diafragma y el obturador.

A menor número de Iso/Asa, más tiempo necesitaremos de exposición, a mayor número, menos tiempo. Lo que hay que tomar en cuenta es que ese número incidirá en la calidad de imagen.

Aunque usemos cámaras digitales, existe un sensor que emula al rollo de película por lo que debemos estar atentos ante el efecto que buscamos.

¿Parece complejo? Un poco, lo importante es relacionarte con tu equipo y decirle sí a esta aventura.

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