Puede que no seas fanático de Metallica, pero de seguro conoces Enter Sandman, Nothing Else Matters y The Unforgiven. El trío de canciones pertenece al álbum Metallica, mejor conocido por los seguidores de la banda con el nombre de The Black Album, debido a su portada negra donde apenas se pueden ver los trazos de una serpiente y el logo de la banda.
7 imperdibles curiosidades del Black Album de Metallica

El disco llegó a las tiendas el 12 de agosto de 1991 y cambió completamente la historia de la banda. Aunque ya tenían un disco de platino por …And Justice For All, los de Metallica querían más. “Habían llegado a un nivel, pero todavía no estaban en la radio mainstream”, especifica Bob Rock, el productor del álbum.
Precisamente con la intención de apoderarse de los oídos de todos, los de la banda acudieron a Rock, quien ya había trabajado con Mötley Crüe, Kingdom Come, Bon Jovi y The Cult. James Hetfield, Lars Ulrich y Kirk Hammett definitivamente no eran fans de esas bandas, pero reconocían la habilidad de Rock para transformar el sonido de esos grupos.
“Muchos piensan que yo cambié la banda. No lo hice. En sus cabezas, ellos ya habían cambiado cuando los conocí”, reconoce Rock.
El resultado fue un disco que vendió 22 millones de copias, estableció a los integrantes de Metallica como superestrellas y se convirtió en uno de los más vendidos en la historia del metal.
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¿Público aburrido? ¡No más!

“(Hetfield) quería escribir con más profundidad. Quería que las canciones realmente importaran”, asegura Rock.
Pero antes de cambiar el mundo, había algo que los de la banda tenían que hacer: escribir temas más cortos. Lo determinaron en el tour previo a la grabación de The Black Album:
“Nos dimos cuenta de que el consenso general era que las canciones eran demasiado largas”, dijo Hammet a Rolling Stone en 1991. “Todos (el público) tenían estas caras largas y pensé: demonios, no están disfrutando tanto como nosotros”. Hetfield estuvo de acuerdo. Era hora de acabar con las canciones de 10 minutos.
Un millón de dólares y diez meses
La grabación inició el 6 de octubre de 1990 en los estudios One Recording de Hollywood. Se remezcló en tres oportunidades muy a pesar de que Rock les ponía trampas a los de la banda, diciéndoles que tenían que tocar rápido y repetirlo luego.
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Todo empezó con Enter Sandman

La primera canción escrita para el álbum fue la popular Enter Sandman. Tras los largos temas de …And Justice For All, los de la banda buscaban simplificar las cosas. “Escribimos la canción en un día o dos. Todos los bits de Enter Sandman son derivados de un riff principal”, dijo Lars Ulrich en una entrevista.
No se llevaron tan bien con el productor
Es por demás conocido que los de Metallica y Bob Rock no se llevaron nada bien durante la grabación, pero el asunto se intensificó entre el productor y James Hetfield.
“Solía llamar a James ' Dr. No' (…) Cada vez que iba a hacer sugerencia que parecía un poco fuera de lo normal, él decía que no antes de que yo finalizara la primera oración (…) Le dije a los chicos, cuando todo hubo terminado, que no trabajaría de nuevo con ellos. Ellos sentían lo mismo por mí”.
El éxito del álbum cambió las cosas. Rock lo considera su mayor logro profesional y produjo los próximos tres discos de la banda.
La letra original de Enter Sandman era sobre morir en la cuna

La música de Enter Sandman estuvo lista pronto, pero Hetfield se demoró con la letra. Originalmente, pensó en una canción sobre un bebé que muere en la cuna. El resto de la banda y Rock no estuvieron de acuerdo, pues la pensaban para primer single.
“Me senté a hablar con James sobre sus palabras (…) Le dije: ‘lo que tienes es genial, pero puede ser mejor. ¿Tiene que ser tan literal?’”. Hetfield comprendió el mensaje y reescribió la letra.
Fue la primera vez que Metallica usó tres afinaciones de guitarra en el mismo álbum
Los de Metallica estaban acostumbrados a usar la clave de Fa para su sonido pesado. Solo intentaron algo diferente en The Thing That Should Not Be de Master of Puppets.
Rock notó el hecho y lo comentó. Los de la banda se sorprendieron, pues pensaban que era la nota más baja e ideal. “Les dije que Dr. Feelgood de Mötley Crüe estaba en Re”. Los de la banda hicieron el cambio y les encantó el resultado.
Hetfield fue influenciado por Wicked Game de Chris Isaak

Hetfield sabía que lo suyo realmente era “gritar”, no cantar. Un día le tocó a Rock Wicked Game y le preguntó cómo podía hacer eso para Nothing Else Matters y The Unforgiven.
“Entiendo tu gran sonido vocal, así que no tienes que doblar tu voz”, le aconsejó el productor. Hetfield entendió que se trataba de “actuar” y sentir al canción.
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