Venganza en The Following [Crítica 1x03]

En el tercer episodio de The Following vemos que algunos recursos, no del todo saludables, se comienzan a repetir, al mismo tiempo que los aspectos que parecían más interesantes de los personajes durante las primeras entregas, se comienzan a diluir entre aspectos laterales y entre otros personajes que no van a durar más que algunos episodios (o sólo uno).

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Seguidores perseguidos

Creo que, precisamente, uno de los puntos más fuertes del show es la potencial sorpresa ante la posibilidad de que cualquier personaje, que en un momento parece ganar protagonismo, terminará muerto antes del final del episodio, y el hecho de que cualquiera que parezca estar del lado de “los buenos”, puede revelarse súbitamente como un seguidor del culto a Joe Carroll ( James Purefoy).

Pero esto, que ya sucedió con el trío liderado por Emma ( Valorie Curry) y fue una interesante vuelta de tuerca, es algo que ya se repite casi de forma abusiva. De manera que cuando se revelan nuevos seguidores de manera sorpresiva, como en este episodio con Maggie ( Virginia Kull), la esposa del pirómano Rick ( Michael Drayer), el personaje en cuestión es casi desconocido para nosotros y casi da lo mismo que sea seguidor de Carroll o no: un "sorpresivo giro" que no sorprende demasiado.

Imagen Fox Flash

Fuego y venganza

En The Poet’s Fire ( El fuego del poeta) el capítulo está centrado justamente en Rick, un seguidor de Carroll que prefiere el fuego para asesinar a sus víctimas y no se siente cómodo utilizando cuchillos, a diferencia de su maestro y líder.

En un flashback vemos que Rick visita a Joe Carroll en la prisión, al igual que los demás seguidores, y le dice que quiere que su capítulo sea sobre venganza. De ese modo decide matar a los críticos que no fueron favorables con el libro de Joe Carroll. Esto lo descubre luego Ryan Hardy ( Kevin Bacon), aunque nuevamente (en otro de los recursos repetidos y abusados en el show) llega unos minutos tarde, y no puede evitar el asesinato del catedrático que le negó la titularidad a Carroll en la universidad.

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Más tarde, y luego de que Maggie engañara al agente Hardy y a la agente “experta en cultos” Debra Parker ( Annie Parisse) haciéndoles creer que estaba divorciada de Rick, el agente Reilly ( Billy Brown) la acompaña a casa para brindarle protección ante el peligro de su esposo.

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Allí se produce la mencionada revelación de que Maggie era otra de las seguidoras del asesino, con una de las mejores escenas del episodio, sorpresiva e impactante, que tuvo luego el triste desenlace de la muerte del agente Reilly, aunque nuevamente producida a causa de minutos de diferencia entre la revelación y el trágico hecho. Maggie finalmente escapa así que tendrá cierto protagonismo en el próximo episodio.

Familia disfuncional

En la casa de campo donde Emma, su novio Jacob ( Nico Tortorella) y el celoso Paul ( Adan Canto) mantienen escondido al hijo de Carroll, la tensión sigue creciendo, sobre todo entre Emma y Paul, sin que ninguno de ellos haga nada por evitarlo e incluso propicien el enfrentamiento (Emma le corta el brazo a Paul cuando éste le propone una tregua, Paul seduce y rapta una chica para esconderla en el sótano, etcétera).

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En otro flashback nos enteramos que el secreto que Emma no debe saber es que Paul y Jacob tuvieron una relación más allá de su (no tan) fingida homosexualidad. Seguramente, en el próximo episodio Emma se entere de esto.

El asesino literario

Como en los episodios anteriores, la presencia de Poe se manifiesta en múltiples ocasiones, en algo que ya empieza a sonar como una fachada para que parezca que el asesino Joe Carroll es profundo, inteligente, difícil de decodificar, pero que en los hechos no parece tan así.

Del mismo modo, el agente Hardy, quien parece entender a la perfección a Joe Carroll e inicialmente fue contactado por ser el único capaz de resolver este caso, ahora se ve visiblemente afectado por la manipulación del asesino, que no consiste en otra cosa que recordarle su relación su ex esposa Claire ( Natalie Zea) y su debilidad cardíaca.

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También pudimos ver en este episodio muchos flashbacks del primer encuentro entre Hardy y Carroll, que vienen a explicitar (además de que Hardy luego lo haría con sus propias palabras) el poder seductor del asesino.

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Al final del episodio, vemos cómo el trío que tiene secuestrado a Joey, el hijo del asesino y de Claire le está enseñando al niño a matar, para que su vida “tenga mayor significado”, en un video que, para seguir con los juegos psicológicos, le envían a la propia madre del niño y es visto también -como ellos ya sabían que iba a suceder- por el agente Hardy.

Puntaje: 5. The Following comienza a evidenciar sus principales defectos, aunque por momentos logra buenos momentos de suspenso y deja ciertas interrogantes interesantes planteadas a futuro. Por ejemplo: ¿Serán la agente Parker o el joven agente Mike Weston seguidores del asesino? ¿Qué piensan ustedes?

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