True Detective: Un enigmático caso [Crítica 1x01]

Dos detectives expuestos ante una cámara y sometidos a un interrogatorio sobre los eventos que ocurrieron en la investigación de un caso de hace 10 años. Así empieza True Detective, una de las series más esperadas de la temporada y que aspira a convertirse en el ojito derecho de la audiencia durante este curso.

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Un cruel asesinato

En los primeros instantes del episodio presenciamos una escena de crimen macabra y turbulenta, repleta de señales apocalípticas y que recuerda mucho a las mostradas en Hannibal. Los guionistas ponen al espectador en un lugar incomodo, a través de los densos e hipnóticos paisajes de Texas y la sórdida ambientación que preside la serie en todo momento.

La promesa de que esta temporada inicial tendrá una resolución final es un gran aliciente, pues significa que el relato no será deformado ni se añadirán subtramas innecesarias. Recordemos el jarro de agua fría en la primera temporada de The Killing, cuando no se resolvió el misterio y acabó con un final abierto para alargar la serie otra temporada.

Hemos visto una y otra vez como grandes producciones se acababan degradando por culpa de estirarlas más temporadas de las previstas, en pos de los intereses comerciales de las cadenas que tienen los derechos. En cambio, True Detective es una historia de 8 episodios escritos al completo por Nic Pizzolatto, un hecho insólito en televisión y que debería proporcionar una historia redonda y bien planificada. Al igual que otras series del género, su estructura será novelística, cociéndose a fuego lento y respetando los tempos de la temporada para ir desentrañando los entresijos de la trama. 

Imagen HBO

Una estructura singular

La narración se divide entre los testimonios de los dos detectives y los flashbacks de la investigación del 95. Una original propuesta que se aleja de los estereotipos y cánones más trillados de las series criminales, ofreciendo un refrescante estilo de conducir el hilo y explicar el relato.

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Revisar pasado y futuro de un personaje, en diferentes épocas, es un ejercicio tremendamente interesante y narrativamente muy rico, si se hace bien. Un ejemplo de ello lo encontramos en las primeras temporadas de Lost, que explotaron al máximo la fórmula de los flashbacks, a través de los cuales se iba perfilando la personalidad de cada personaje. 

En True Detective, esta intersección de escenarios nos relevará secretos de cada personaje e irá proporcionando paulatinamente información sobre todos los sucesos que fueron derivando durante una misteriosa investigación.

Imagen HBO

Personajes enigmáticos

Uno de los puntos fuertes de la serie radica en la química entre Cohle ( Matthew McConaughey) y Martin ( Woody Harrelson). Ambos están brillantes durante todo el piloto y muestran una fuerte conexión en las escenas que comparten.

McConaughey realiza un papel descomunal, consiguiendo dotar al personaje de un equilibrio de fuerzas entre su lado perturbador y su parte entrañable. Quizás se le dedica algunas escenas demasiado pretenciosas para potenciar su talento al máximo, aunque el relato no se resiente por ello. No me cabe ninguna duda de que entrará de pleno en las quinielas de los próximos Globos de Oro para relevar al recientemente galardonado Bryan Cranstorn.

Por el otro lado, Martin es, a priori, un personaje más afable, social y conciliador, aunque en el piloto se han encargado de dejar suficientes indicios para señalar que nada es lo que parece y que ambos personajes esconden muchos secretos. Desentrañar el conflicto que los llevó a separarse tras la investigación y descubrir cómo evolucionó esta relación es el mayor interés de la serie, ya que la parte criminal es, pese a su innovadora estructura, un tanto reiterativa y tópica.

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Sorpresas

Pese al aspecto convencional que ha seguido la investigación, el final del episodio nos aporta datos que multiplica nuestro interés. Conforme avanzan los minutos, las preguntas a los detectives durante las entrevistas empiezan a ser más impertinentes y privadas, dejando claro que no se trata un simple procedimiento.

Finalmente, descubrimos que el asesino que presuntamente encarcelaron hace 10 años ha cometido otro crimen y que Cohle está siendo tratado como un sospechoso. Los interrogantes que sonsaca este descubrimiento son muchos, aunque el más evidente es el que se encarga de recordarnos el mismo Cohle al final del episodio: si encarcelamos al asesino hace 10 años, ¿cómo puede ser que haya cometido otro asesinato?

Imagen HBO

La duda que nos atrapa y conmociona en esta serie no es tanto la identidad del asesino, sino qué sucesos ocurrió en esa misteriosa investigación y cómo ha acabado derivando en el presente. Un rompecabezas tremendamente cautivante y enigmático que promete depararnos muchas sorpresas.

¿Qué les ha parecido el piloto de True Detective?