La cuarta temporada de Glee no me deja de sorprender. Esta vez, el tercer episodio del año, Makeover, mezcló tópicos que se relacionan, para mí, enteramente con Nueva York: moda, amor y canciones.
Transformaciones y una visita inesperada en Glee [Crítica 4x03]

En Ohio las cosas están por cambiar. Fundamentalmente porque Will Schuester ( Matthew Morrison) se dio cuenta que ya no se siente motivado como antes. Él siempre se destacó por ayudar a que sus alumnos y profesores amigos consiguieran sus sueños, avanzaran. Schuester se encuentra estancando, como en pausa. Hasta que se da cuenta dónde quiere estar, en la política.
Por ahora no sabemos qué tipo de puesto, solamente que se postuló para una posición en un partido político. Quiere ayudar a que haya más fondos para el arte en las diferentes escuelas. Esto no sólo lo alejará un tiempo de las aulas, sino de su prometida Emma Pillsbury ( Jayma Mays).

Otro personaje que se siente dejado atrás es Blaine Anderson ( Darren Criss). La razón por la cual decidió ir a McKinley era nada más y nada menos que Kurt Hummel ( Chris Colfer). Pero este está probando suerte y viviendo nuevas experiencias en Nueva York, en cambio, Blaine se siente atrapado en Lima, Ohio. Por eso decide hacer cosas para él, para ocupar el tiempo y la mente. Pero cada vez se siente más alejado de Kurt.
Kurt, por su parte, está pasando su mejor momento en Nueva York. Y acá es cuando se mezcla un poco de Sex & the City con “El Diablo Viste A La Moda”. Y es una mezcla que me sorprendió para bien.
Isabelle Wright ( Sarah Jessica Parker) es la nueva editora de Vogue.com y es un papel que a ella le sienta muy bien. Sigue siendo muy Carrie Bradshow por momentos pero creo que será una gran mentora para Kurt durante esta cuarta temporada. Ah y sí, además de ser una gran fashionista, sabe cantar muy bien.

Aprovechando esta veta de la moda, Isabelle y Kurt le realizan un makeover a Rachel ( Lea Michele). Ya de a poco, deja de ser la niña de Ohio para transformarse en una mujer de la Gran Manzana. Esta transformación le da una nueva confianza que le permite invitar a cenar a su, por ahora, solamente amigo Brody ( Dean Geyer). Con tantos “avances” frontales, debe ser muy difícil resistirse a esos ojos celestes. Sobretodo con la visita inesperada de Finn ( Cory Monteith).
Extrañé ver en este tercer capítulo a la mala e irónica de Kate Hudson. Episodio tras episodio va ganando mi afecto. ¿Hasta cuando seguirá presionando a Rachel? Ah, algo que no puedo dejar de pasar por alto es si a Courtney Love le gustará la versión que hicieron de Celebrity Skin. ¿A ustedes qué le pareció?






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