¡Excelente! Un gran regreso para esta serie que ya está en su segunda temporada y que vuelve a mostrarnos más de la vida de los Ewing. En especial después del gran final y de todo las cosas que nos revelaron.
Los Ewing regresan en episodio doble en Dallas [Crítica 02x01-02]

Con un episodio doble de Dallas, “Battle Lines” y “ Venomous Creatures”, vemos cómo la compañía de los Ewing está en ascenso. Mientras que Christopher ( Jesse Metcalfe) intenta que su proyecto sea sustentable y John Ross ( Josh Henderson) es John Ross, no hay otra explicación para eso. Rebecca ( Julie Gonzalo) muestra quién es, a Sue Ellen ( Linda Grey) los problemas la encuentran y Annie ( Brenda Strong) revela un gran secreto.
Trazando las líneas de batalla
En esta temporada las líneas están un poco difusas, ya que John Ross continua con sus planes de terminar con toda su familia y con su ex-amada, devolviéndole la empresa a su padre. Quién por otra parte, se hace el inocente y juega para todos los bandos. Rebecca decide contar quién es y demostrar cuán lejos puede llegar, mientras que Christopher juega a la casita con Elena y esta súper confiando en que las cosas le van a salir bien. Finalmente, descubrimos el gran secreto de Ann y cómo repercutirá eso en Sue Ellen.
La forma en que Pamela “Rebecca” Barnes les informa quién es y que realmente lo quería, fue genial. Inclusive cuando le da la oportunidad de un trato, obviamente no es aceptado y ya no vemos más a una mujer queriendo ser protegida, sino una mujer confiada y segura de lo que quiere. Inclusive cuando John Ross le ofrece el trato de su vida, al llevarle lo que tenía bien escondido su adorado primo.

La que más pena me da es Sue Ellen, no puede ser que tenía todo para ser la próxima gobernadora, sin embargo el pasado reaparece y no puede escapar de ello. Ann también se ve involucrada, ya que el deseo de recuperar a su hija perdida es mucho más fuerte y Sue parece estar de acuerdo con ello. No obstante las cosas no salen como esperaban, pero al menos Bobby se porta como el brillante caballero que es.
De esa forma quedan trazadas las líneas: Christopher contra Rebecca, aliado con su padre y la hermana de Tommy; Rebecca contra Christopher, aliada tal vez de John Ross; John Ross contra Christopher, Bobby y Elena, aliado con su padre y Rebecca (aunque de esta no sepa nadie más que ellos); Bobby y Ann contra su ex. Demasiado ¿no?
Esperando el milagro
Como siempre las cosas no salen bien y ver a Sue Ellen casi retomando su viejo vicio, fue fuerte y me desesperaba gritando: ¡No! Por suerte, su príncipe azul, J.R., llegó y solucionó ese pequeño problema sin saberlo. Asimismo, le dice que visite a su vieja amiga para darle un poco de esas fuerzas que tiene ella y que no se haga problema, que él solucionará las cosas. Ame ver a J.R. en esa posición y apenándose por ella, realmente la quiere, aunque tenga una forma muy rara de demostrarlo, pero me encanta.

Christopher pierde en el tribunal para la anulación del matrimonio, en especial porque su testigo se dio vuelta, dando a entender que había una nueva amistad entre John Ross y Rebecca. Si bien, parece que los opuestos se atraen, porque como terminó, me encanto. Matándose a besos, fue genial, sellaron un gran pacto.
Al verse rechazada por su hija, Ann entra en una gran depresión, lo que lleva a Bobby a intentar descubrir más sobre lo que realmente pasó con Emma. Por supuesto que termina descubriendo las cosas, el problema es que hay mucho más todavía para desenterrar.
El culebrón norteamericano está de vuelta y tiene mucho más para nosotros. No pensé que lo extrañara tanto y ha sido un gran regreso. Por otra parte, me gusta que las cosas sucedan rápido, que no te dé tiempo a pensar mucho y demás.






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